Crítica de Clásica

Pequeña suite francesa

orquesta filarmónica de málaga

Teatro Cervantes. Fecha: 15 de abril. Programa: 'Petite Suite', CD.71, C. Debussy; 'Poème, para violín y orquesta en Mi bemol', Op.25, E. Chausson; 'Tzigane. Rapsodia de concierto para violín y orquesta', 'Bolero' y 'Rapsodia Española', M. Ravel. Dirección: Manuel Hernández Silva. Solista: Josef Spacek (violín). Aforo: Completo

En 1928, Maurice Ravel, que por aquel entonces era ya una figura consagrada, realizó una gira por España que recaló en nuestra ciudad. El concierto fue un auténtico fiasco. El público malagueño no estaba preparado para la música contemporánea, ni siquiera la más accesible, y no esperó hasta el final para abandonar la sala. ¡Qué le habrían hecho a un Schönberg! En fin, de eso hace ya mucho tiempo. La música de Ravel fue protagonista del duodécimo programa de la temporada de abono de la OFM, íntegramente dedicado a compositores franceses. Antes de dar comienzo el concierto, se guardó un minuto de silencio en memoria del maestro José Ballester, recientemente fallecido y miembro de la orquesta desde su fundación.

Una cuidada sonoridad, muy ajusta al estilo y las características armónicas de su orquestación, fue la nota definitoria en la Petite Suite de Debussy. Siguieron dos interpretaciones de altura. El entendimiento con el violinista checo Josef Spacek en el Poème de Chausson y Tzigane fue absoluto, de tal modo que las frases que fluían del instrumento solista parecían encontrar en la orquesta, más que un correlato, su propia continuidad natural. Spacek, que mostró su lado más sensible y sugerente en los solos, se reveló como un verdadero virtuoso en los pasajes más exigentes de la composición raveliana. Una mención expresa merece -como no puede ser de otro modo en un monográfico francés- la sección de viento-madera. Bien empastada durante el concierto, tuvo momentos sobresalientes en el Poème o en la Rapsodia española, aunque el de mayor lucimiento correspondió a los solistas con el Bolero. Las cuerdas supieron ocupar siempre el discreto lugar que esta música les reserva.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios