Una temporada que crece, que se vuelve más rigurosa en cuestión de calidad y que avanza en la consolidación esperada de cara a su 30 aniversario. Así ve la apuesta lírica para 2017-2018 del Teatro Cervantes Juan Antonio Vigar, director-gerente del escenario municipal. Para ello, se ha multiplicado por cinco el presupuesto de otros años y se han alcanzado los 250.000 euros, un esfuerzo que era "importante hacer porque la ciudad lo reclamaba". De la mano de la Fundación Unicaja, y otros patrocinadores, las tablas acogerán "tres óperas de repertorio, muy conocidas y valoradas" de tres "autores referenciales", Puccini, Mozart y Verdi. Después de muchos años, el Cervantes recupera la producción en todos los títulos, Turandot, Così fan tutte y Rigoletto. Fuera de abono pero con la pretensión de redondear la propuesta llegará el 17 de febrero el recital de Gregory Kunde.

"Málaga tiene que ser uno de los centros operísticos de Andalucía junto con el teatro de la Maestranza de Sevilla y el Villamarta de Jerez, y nos estamos acercando cada vez más a estos teatros", apuntó Juan Antonio Vigar. "Nuestro trabajo va en la línea de impulsar la temporada para que cada vez estemos más cerca de lo que queremos ser y hacer", agregó, al tiempo que subrayó la intención de avanzar "aún más en la calidad, ya alta, de nuestra programación" en la temporada 30, que se cumplirá en 2018-2019. Adelantó también la participación en mayo de 2019 del barítono malagueño más internacional, Carlos Álvarez, que traerá Otello.

Pero antes de todo esto, el 3 y 5 de noviembre se estrenará el restaurado telón de boca que Bernardo Ferrándiz pintó en 1870 para dar la bienvenida a Turandot. La ópera póstuma e inacabada de Giacomo Puccini llega con una producción musical del Teatro Cervantes y una producción escénica del Teatro de la Maestranza. Con el maestro Arturo Díez Boscovich a la batuta, el gran montaje contará con la Orquesta Filarmónica de Málaga, la Escolanía Santa María de la Victoria y el Coro de Ópera de Málaga. También con voces malagueñas entre los solitas como las de Antonio Torres y Luis Pacetti, que ayer interpretaron dos piezas en la presentación de la temporada.

La siguiente cita se hará esperar hasta el 17 de febrero y será el recital del tenor Gregory Kunde, "que llega en un momento dulce, tras recibir el premio al Mejor Cantante Masculino en los Internacional Opera Awards 2016, una suerte de Oscar en el ámbito de la lírica", como explicó Vigar. En su actuación interpretará obras de Bellini, Rossini, Verdi, Puccini y Leoncavallo. Los abonados tendrán un plazo preferente para la compra de entradas.

El 2 y el 4 de marzo será momento para divertirse con la ópera bufa en dos actos de Mozart Così fan tutte, con los malagueños Berna Perles en el papel de Fiordiligi y Damián del Castillo como Guglielmo. En este caso, con producción también del Cervantes, dirige el maestro Manuel Hernández Silva, director titular de la Orquesta Filarmónica de Málaga. El 18 y 20 de mayo se pondrá fin a la temporada con el Rigoletto de Giuseppe Verdi, con Ignacio Garcia como director de escena y Salvador Vázquez como director musical. "Son producciones complejas, en las que hay grandes colectivos detrás y en muchas ocasiones superan las 100 las personas sobre el escenario", dijo Francisco Rodríguez, responsable de la programación lírica, quien resaltó que el impulso que se imprime a las últimas temporadas ya está viendo los resultados.

La concejala de Cultura, Gemma del Corral, quiso también destacar "el apoyo al talento local" que se brinda en estas propuestas. "Creemos que es necesario que la gente de Málaga encuentre en su teatro el lugar para exponer su talento, no solo de cara a la ciudad, sino al resto del mundo", apuntó Del Corral. Al mismo tiempo señaló "el esfuerzo por intentar "que la ópera llegue a todos con precios asequibles" que se han reducido para jóvenes y mayores de 65 años.