Comedia dramática, Francia, 2008, 103 min. Título original: LOL (Laughing Out Loud). Dirección y guión: Lisa Azuelos. Fotografía: Nathaniel Aron. Intérpretes: Sophie Marceau, Christa Theret, Jéremy Kapone, Marion Chabassol. Cines: Málaga Nostrum, Vialia, Rosaleda, Plaza Mayor, Miramar, La Cañada, Rincón de la Victoria.

Si en La belle personne, aún en cartelera, veíamos a adolescentes enamorados emulando el protocolo del galanteo y los padecimientos del desamor al estilo siglo XVIII, en LOL, enésimo nuevo éxito de taquilla del cine francés, la cosa va de lo mismo pero subrayando el carácter contemporáneo y urbano de sus criaturas, igualmente enamoradas y en permanente crisis con sus padres, pero bien provistas de ipods, teléfonos móviles y ordenadores portátiles desde los que chatear y mandarse mensajitos románticos en abreviaturas.

LOL aspira así a erigirse en reflejo idealizado de una juventud gala que en nada se parece a la de La clase. Y es que aquí los conflictos están todos estereotipados por la vía sentimental y lo multicultural responde más a la estética publicitaria de los United Colors of Benetton que a cualquier realidad social mínimamente problemática.

Hay quien ha escrito, no sin razón, que esta LOL es a la era Sarkozy lo que Amélie fue al populismo de Le Pen, asunto éste que nos hace pensar en un cine calzado a la medida de unos tiempos en los que el conflicto generacional o la identidad adolescente no dejan de ser un reclamo más para el consumo de productos varios, incluido el cine.

Así, las diatribas familiares o los roces entre jóvenes parecen responder más a un atractivo diseño de clichés y estereotipos universales que al retrato sociológico inspirado en la realidad. Si todo ello lo aliñamos con una pasarela de niños y niñas guapas en ropa de H&M, un puñado de canciones pop anglosajonas y un final feliz que equipara a adultos y jóvenes en el amor romántico, tendremos en la parrilla toda la carnaza fresca para las identificaciones más básicas y bobaliconas.