"¿Alguien sabe quién es Adolfo Suárez?", pregunta el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. El auditorio ni se inmuta e, incrédulo, repite la pregunta: "¿Pero nadie sabe lo que fue Adolfo Suárez?". Se ve que a los alumnos del instituto Martín de Aldehuela les quedan algo lejanos los grandes nombres de la Transición. Precisamente para eso ha acudido hasta las instalaciones de este centro educativo de Ciudad Jardín. Hoy le toca instruir a los más jóvenes. La lección del día se llama Constitución española.

Ni los derechos fundamentales, ni la Corona, ni las Cortes generales. El regidor barrió para casa y centró buena parte de su conferencia sobre la Constitución en su título octavo, De la organización territorial del Estado, para reclamar "ingresos de los impuestos de las comunidades autónomas". Es la "tarea pendiente" que De la Torre recuerda casi siempre que tiene ocasión. Que, a diferencia de lo que sucede en países como Francia o Dinamarca, el porcentaje del dinero público que manejan los ayuntamientos españoles apenas si supera el 10 por ciento del total, que lo limitado de esos recursos ahoga las economías locales y que, para colmo, a su entender, la norma fundamental del Estado daba vía libre a lo contrario. "Las competencias que estaban en Madrid podían haber pasado a los ayuntamientos directamente, pero pasaron a las comunidades autónomas, con lo que hemos creado nuevos centralismos", se lamentó.

Los chavales, casi un centenar de alumnos de tercero de Secundaria del Martín de Aldehuela, traían sus preguntas anotadas en recortes de papel y no versaban precisamente sobre el Pacto Local. Antes de eso, el alcalde los ilustró sobre los pasos que condujeron a la aprobación de la Constitución cuando ellos aún no habían nacido y él ya era un político en activo por la UCD: el fin de la dictadura, las primera elecciones democráticas y, por fin, la Constitución, "que nos abrió la puerta de la Unión Europea".

Mañana cumple 29 años ese texto constitucional. De ahí la visita al Martín de Aldehuela de De la Torre en compañía de hasta cuatro miembros de su equipo y ante la expectación de alumnos y profesores, que el alcalde no viene de visita todos los días. En la ronda de preguntas, que cómo lleva que le echen la culpa de casi todo, que cómo mentalizar a los ciudadanos para que no dejen la basura donde no deben, que cuáles son las cosas a mejorar en Málaga... Los ciudadanos del futuro apuntan maneras.