El flamenco en Salvador Rueda es el título que da nombre al volumen editado por la Diputación de Málaga que repasa la vida del poeta malagueño y su relación con el flamenco. El libro está ilustrado por el pintor y grabador, también malagueño, Eugenio Chicano. A la presentación, que tuvo lugar en la Peña Juan Breva, asistieron el presidente de la Diputación Salvador Pendón, el autor, Antonio Gómez Alarcón, y el presidente de la Peña Juan Breva, Gonzalo Rojo.

Tal y como consta en las palabras iniciales del autor en el libro, Salvador Rueda es considerado "el poeta renovador de la lírica en lengua española y pionero, precursor y cofundador del Modernismo". Su obra se caracteriza por el predominio del ambiente andaluz, el culto a la palabra y la musicalidad y colorido de sus versos.

Para Antonio Gómez, "su pasión por el arte flamenco, la manifestación cultural más genuina y característica de Andalucía, y la gran admiración y aprecio que siempre ha sentido por el poeta malagueño son las motivaciones que le impulsaron a estudiar las relaciones, tanto literarias como vitales, entre este arte y nuestro eximio poeta".

Con este trabajo se pretende divulgar y dar a conocer la vida y la obra flamenca de quien ha sido "grandísimo" poeta y, en palabras del también poeta malagueño Alfonso Canales, "ante todo y sobre todo, el poeta de Málaga".

Según el presidente de la Diputación, Salvador Pendón, "Antonio Gómez y Salvador Rueda, separados por el tiempo en el que nacieron y vivieron, se aproximan por la senda de la común y ancestral raíz campesina y axárquica". Así, Pendón alabó la tarea investigadora del autor, Antonio Gómez, vecino del municipio axárquico de El Borge, maestro y aficionado al flamenco desde la infancia, arte al que ha dedicado todo su tiempo libre mediante el estudio y la investigación que dan fruto al presente libro.

Salvador Rueda creó junto a Manuel Reina, de Córdoba, una estética literaria de tipo parnasiano denominada Colorismoque le hizo predecesor español del Modernismo hispanoamericano. Posteriormente, Rueda asumió la estética modernista llevada a España por Rubén Darío