"¿Por qué ve a los niños? ¿Porque tiene una sobredosis de medicamentos?", fue la primera andanada de preguntas lanzadas en el Cinefórum de El orfanato. La respuesta fue la de los compañeros del muchacho que llenaban una de las salas del Albéniz: una risotada. "Es una pregunta seria", apuntó el chaval.

"Es la primera vez que hacemos un debate con público sobre la película en España", dijo el director de El orfanato, J. A. Bayona, a quien acompañaban el guionista Sergio G. Sánchez y el actor Andrés Gertrudix. "Es que dicen que hablo el inglés de una prostituta egipcia", bromeó Bayona. "¿Os ha gustado la peli?, preguntó Gertrudix a los jóvenes estudiantes. Bayona dio algunas claves sobre la película, pero sin explicar el sentido que tiene para él El orfanato: "Queríamos que fuera una historia que el público interpretara, que sea él quien adivine". También contó la razón de esa decisión: "No explicar suma misterio al relato". Como regalo, dio una pequeña lección de cine: "Toda la película está contada desde el punto de vista de ella".

Más preguntas, muchas más preguntas: "¿Por qué has elegido el género de terror para tu debut?" Respuesta: "Por el guión", aclara Bayona. "¿Qué importancia tiene Peter Pan en la película?". Bayona le pasa el micrófono a su guionista, Sergio G. Sánchez: "Nace de ahí. De la mezcla de Peter Pan y La vuelta de tuerca, de Henry James".

Algunas de las preguntas eran fáciles -"¿Dónde se rodó la película?"-, pero otras tenían miga: "¿Qué piensas sobre el canon digital?" Bayona echó balones fuera y comenzó con un escurridizo "no estoy metido en el tema". Pero casi todas las dudas eran sobre algún elemento de la trama y sobre las intenciones del guión. Su autor, Sergio G. Sánchez, tuvo que hablar mucho sin explicar demasiado: "Hay dos versiones para interpretar El orfanato. Puedes creer que hay fantasmas o que no los hay. Todo está en la película".

Una sesión de cine instructiva para unos chicos que no se asustaron mucho.