Derechos de los militares

La Constitución no prohíbe ni limita los derechos de reunión y manifestación de los militares para fines lícitos. La ley orgánica que regula ese derecho establece que "la asistencia de militares de uniforme, o haciendo uso de su condición militar, a manifestaciones públicas se regirá por su legislación específica". Las Reales Ordenanzas de Juan Carlos I establecen que "los militares podrán reunirse libremente para fines lícitos, en lugares públicos o privados, observando lo que con carácter general o específico establezcan las disposiciones vigentes". Con carácter general ninguna reunión, concentración o manifestación está sometida al régimen de previa autorización. La persona física o entidad promotora sólo tiene obligación de comunicar su celebración a la Autoridad responsable de la seguridad pública. Por su parte, con carácter específico, la ley disciplinaria de las FAS tipifica como falta grave la asistencia de militares a manifestaciones públicas sólo "si tienen carácter político o sindical". Por tanto, los militares pueden manifestarse en lugares públicos para reivindicar, reclamar, defender o promocionar sus derechos y legítimos intereses profesionales, económicos y sociales. El TC declara que sólo son actividades de carácter sindical la huelga, la negociación de convenio colectivo y la declaración de conflicto colectivo. Sólo son de carácter político las manifestaciones que defiendan o promocionen los intereses e ideología de un partido.

Democracia y dictadura

Los que tenemos la suerte de vivir en una democracia, más o menos perfecta, nos extrañamos -por ejemplo- de que podamos salir y entrar de nuestra patria cuando nos de la real gana sin que ninguna autoridad nos lo impida. Esta libertad, aparentemente tan tonta, es de vital importancia por ejemplo en Cuba, donde no se puede salir del país cuando uno quiera y mucho menos a donde uno quiera. La libertad para adquirir bienes que puede ser un piso, un coche, una bicicleta, unos zapatos, etc... no lo puedes hacer en muchas dictaduras, todo está racionado y controlado por el Estado. La única limitación que tenemos en las democracias es el dinero que gastamos más de la cuenta y casi nunca nos llega a final de mes, pero eso es un problema nuestro de autocontrol, no del sistema democrático.

Felipe Díaz (Correo electrónico)

La Constitución

Mañana, 6 de diciembre, cumple 29 años nuestra Constitución, tiempo de verdadera ilusión, que ha demostrado que es posible vivir en paz con un programa básico, que propugna como valores superiores la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político, asequibles para todos. Para ello, todos los pueblos de España deben acatarla para la mejor convivencia entre todos.

José Santana (Correo electrónico)

Zapatero, que accedió al poder en el año 2004 prometiendo una paz al estilo del proceso que se llevó a cabo en Irlanda del Norte, también se vio debilitado por la falta de apoyo del conservador Partido Popular de la oposición, que rechazó tener nada que hacer con los separatistas vascos hasta que depusieran las armas. A diferencia de Gran Bretaña, donde laboristas y conservadores trabajaron en un frente común contra el IRA, la mayoría de partidos políticos españoles están fuertemente divididos en el tema de ETA. Zapatero llevó a cabo un cambio crucial en la manera en la que Madrid trató con ETA. Promulgó una ley en el año 2005 que permitía que el Gobierno emprendiera directamente conversaciones con los separatistas armados vascos. Anteriormente, los gobiernos españoles se vieron obligados a mantener conversaciones en secreto con ETA, ya que la ley impedía cualquier tipo de contacto con la organización terrorista. Una vez presentada la nueva ley, Zapatero anunció que las conversaciones continuarían -en medio de la condena generalizada de la oposición conservadora y de los grupos de víctimas. No obstante, otros partidos apoyaron las negociaciones de paz. (...)

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios