Un ciclista amenaza partirle la cara a un camionero. Tal cual. A las diez y diez allá por la fuente de la tres desgracias.

Plaza del General Torrijos y torrijas de tráfago. Histérica rotonda de entrar y salir con ojos en el cogote. Una pareja en maillot rosa, culote almohadillando el perineo, casco, guantes y espejuelos galácticos por gafas. Pregón al conductor que casi se lo lleva por delante frente al hospital Noble.

Tranquilo, esto no va de carril bici, ni de movilidad. Va de la invasión y pasión perico fernández. Los enjambres matutinos de grupetos de colorines. Siete días a la semana por Paseo de los Curas, marítimo o volador apretando y dando al pedal. Indurains de la vía. Se multiplican a los calores, cuando se seca el asfalto que tanto les gusta rodar. Desde muy temprano se entreveran con el tráfico de Antonios, Vickys y buses escolares.

El fenotipo del ciclentón es el de viejennial sin afeitar, niquelado y entallado que sale de ruta con los colegas a la fresca. Dando de envidia a los otros conductores por su ideal estado de forma física y la libertad de emplear la dichosa mañana en disfrutar del sudor. Alejado de otras cargas negociosas. El resto de semovientes atornillados al potro de montoro les miramos con cierto rencor o envidia. Cómo se saltan los semáforos al ritmo del cricrí de la cadena. Como los urbanitas que al tran tran se desplazan en bicicleta retropaseo con cesta y alforjas rellenas de desodorante.

Están los ciclistas de Triatlón que combinan la carrera pedestre y natación con la pedalada. Especie a parte. Sólo en Málaga 54 clubs con papeles en orden. En la memoria 2016 de la Federación Andaluza de ciclismo cuentan 11.750 licencias entre deportistas, técnicos y árbitros. 536 pruebas en 365 días.

Sólo en Málaga figuran 2.197 pulidores inscritos en 25 categorías que van desde Alevín al Master 50 femenino Cifuentes. Un crecimiento del 182% desde 2009 a 2016. A veces pienso que tanta pedalada y huida es para evitar las sufridas tareas y discusiones domésticas. Mejor que un camión te depile los gemelos que quedarse empotrado viendo telemierda en el sofá.