En el tejado

F.J. Cantador

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Estimado Jermain Defoe

Estimado Jermain Defoe: es imposible no emocionarse cuando uno conoce la historia de amistad y tremendísima humanidad que te unía al pequeño ángel Bradley Lowery, una historia que comenzó cuando tú y otros jugadores del Sunderland lo visitasteis en el hospital donde el pequeño estaba ingresado luchando con tan sólo cinco años contra un neuroblastoma, un tumor maligno y terminal. Cuando apareciste por la puerta de su habitación, el pequeño creyó estar en el Cielo disfrutado de su ídolo, de ti, un delantero goleador que jamás ganará un balón de oro en el mundo del fútbol, pero te has ganado algo mucho más importante, el corazón y la admiración infinita de todo el que ha sabido valorar, merced a esa relación, que eres una de esas personas que escasean, una buenísima persona.

Desde aquel día del hospital, en el que Bradley te abrazó con todas sus fuerzas, os hicisteis inseparables. Tiernas son esas imágenes que se han quedado para la historia que inmortalizaron cómo lo sacaste en brazos al césped del Estadio de la Luz -el campo del Sunderland- en los prolegómenos de algún partido que otro; y tiernas fueron aquellas otras en las que incluso le hiciste saltar contigo agarrado de tu mano al terreno de juego del histórico Wembley el día en el que volviste a ser titular con la Selección Inglesa para compartir con él ese momento tan importante para ti. Luego, cuando esa terrible enfermedad lo tenía postrado en el hospital, muchas fueron las noches en las que te pedía que te quedaras para dormir abrazado a ti, y tú te quedabas.

Bradley, con sólo seis años, se ha ido y permíteme que reproduzca la carta de despedida que le has dedicado en las redes: "Adiós mi amigo, te voy a extrañar mucho. Me siento tan bendecido por Dios desde que te trajo a mi vida y viví algunos momentos increíbles contigo, por los que estoy muy agradecido. Nunca olvidaré la forma en que me miraste, cuando te conocí por primera vez, el amor genuino en esos lindos ojos. Realmente me resulta difícil encontrar palabras para expresar lo que significas para mí. La manera que tenías de decir mi nombre, tus sonrisas al ver que las cámaras venían y te sentías como una pequeña superestrella y el amor que sentía cuando estabas conmigo. Tu coraje y valentía seguirán inspirándome para el resto de mi vida. Nunca sabrás lo que me has cambiado como persona. Dios te tiene en sus brazos y siempre te llevaré en mi corazón. Duerme tranquilo pequeño. Mi mejor amigo". Jermain Defoe. Sobran las palabras. Enhorabuena por ser tan grande.

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