Luces y sombras

Antonio Méndez

Ideas propias

S IN lugar a discusión Damián Caneda fue el gran fichaje del PP para el Ayuntamiento de Málaga en las pasadas elecciones municipales. La incorporación del empresario abría el abanico de posibilidades para el recambio de Francisco de la Torre antes de que concluya su presente mandato. La otra opción la encarna el presidente de Diputación, Elías Bendodo, que en su fuero interno anhela esa ambición por encima de cualquier otra. Si en las altas esferas del PP se albergaban pocas dudas antes de celebrarse los comicios de mayo de que la etapa del regidor estaba agotada, los primeros meses de nuevo gobierno han servido para refrendar esa convicción. Los populares, con todas las piezas sobre el tablero, juegan con el calendario electoral y con la realidad de que la atonía de la crisis y de la oposición permiten sopesar todas las hipótesis antes de programar un relevo. La cuestión más complicada sería convencer al alcalde y también senador de que debe facilitarlo.

Esperaba que Caneda asumiera alguna responsabilidad importante en el ejecutivo. Acabó en Cultura y Deportes y ahora suma Turismo. Suficiente para comprobar que su estilo de gestión es distinto y lo ejerce con una independencia que seguro que le creará problemas. Incluso con su mentor, Bendodo. Con De la Torre se daba por anticipado, aunque da la impresión de que el mandamás le deja trabajar con un grado de autonomía que no gozaron sus antecesores en ese cargo. A todos los efectos, el alcalde ha sido estos años el concejal de cultura in pectore y los resultados de su política se comentan solos. Hay un magnífico Centro de Arte Contemporáneo, pero le cuesta a los malagueños 3 millones anuales. Otros 2 van para el Thyssen, tras rehabilitar el inmueble. Más de 30 gastados en la Tabacalera para el fallecido Art Natura. Sus promotores, que ya ingresaron otros 3 que ahora no devuelven, también querían su correspondiente subvención para no ser menos. Sabían que la instalación era deficitaria desde el principio. Más de 20 millones en comprar el edificio del cine Astoria, el museo de los museos que Caneda ha enviado a mejor gloria. Con su gestión privada al menos ahorrará el millonario mantenimiento del edificio. La deuda de 3 millones del Festival de Cine... En este pantano anda metido este concejal con ideas propias. una necesaria rara avis.

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