TWITTER es un arma en tiempo electoral que puede desnudar a cualquiera. Josele Aguilar resumió su frustración sobre lo que está aconteciendo en el proceso de elaboración de listas en uno de sus mensajes. El problema no es tanto de los que han perdido el último congreso sino de los que lo han ganado y no se han enterado todavía, se lamentó con ironía de la nueva dirección del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, desbordada por las huestes de Griñán en la mayoría de las provincias al elaborar las candidaturas al Parlamento andaluz. El intercambio de tuits posterior dio lugar a comentar la oportunidad de la convención que los socialistas andaluces celebrarán este fin de semana en Málaga. "Mientras no sea un réquiem", remató el líder crítico la conversación con otros dos militantes. Josele usó ayer esta red social para desahogarse, una práctica peligrosa. Por cierto, Rubalcaba estará presente en Málaga en ese encuentro del PSOE andaluz, que finalmente sólo se limitará al sábado. Los socialistas han preferido dejar libre la mañana del domingo a la convocatoria de los sindicatos, en la que será la primera protesta contra la reforma laboral de Rajoy.

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