La esquina

José Aguilar

jaguilar@grupojoly.com

Podemos, en el bando erróneo

Hay algo en Podemos que nadie entiende en el resto de España: ¿qué izquierda es esa que se alía con el nacionalismo xenófobo?

Podemos dio unos cuantos bandazos de conveniencia sobre el conflicto de Cataluña. Pasó de rechazar un referéndum sin garantías a admitir el 1-O como movilización ciudadana digna de ser tenida en cuenta. Paralelamente, su socia favorita, Ada Colau, también pasaba de negar los colegios municipales para la consulta (¡por el bien de los funcionarios!, llegó a decir) a alentar a los golpistas, manifestarse junto a ellos y aceptar los resultados del tramposo y amañado pseudoreferéndum.

Pero el oportunismo de Pablo Iglesias y Ada Colau se ha desbocado tras los hechos consumados de los gobernantes catalanes. Ni una palabra contra Puigdemont, Junqueras, Forcadell y los Jordis -el estado mayor de la sedición-, que se han saltado la Constitución a la torera proclamando la república en Cataluña, y sólo palabras de reconocimiento y gratitud al primero de ellos por su "generosidad" al suspender la independencia segundos después de declararla y un rato antes de confirmarla con su firma en el manifiesto patéticamente cursi de sus parlamentarios.

Y las palabras subsiguientes de Iglesias contra Rajoy: "Ustedes son los principales responsables de que se rompa España", aplicables también a Sánchez y Rivera, los monaguillos de Mariano en la aplicación del artículo 155 de la Constitución e imprescindibles peones de la cirugía desintegradora y separadora de la España plurinacional. Los responsables de la crisis no son los que se quieren ir, sino los que hacen que se vayan.

Nos equivocaríamos si pensáramos que la hostilidad de Iglesias contra la "triple alianza PP-PSOE-C's" -otra cursilada historicista- y su apuesta por los secesionistas es sólo un instrumento para desgastar al PP y echar a Rajoy. Podemos se vuelca con el independentismo porque piensan que supone la oportunidad más inmediata de hacer caer a Rajoy, a Felipe VI y al régimen del 78 entero. Todo va en el mismo lote. No es por reformar la Constitución, sino por destruirla. No es por encajar a Cataluña en España, sino por construir una España diferente con referendos soberanos en todos sus territorios.

Lo que no entiende, o quiere entender, Pablo Iglesias es el tremendo daño que este discurso le causa a Podemos en el resto del país. ¿Quién va a comprar aquí en Andalucía, por ejemplo, que Cataluña no será como las demás en el nuevo Estado plurinacional español? ¿Qué izquierda es esa que defiende al nacionalismo egoísta y xenófobo?

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