COMENCEMOS situándonos brevemente ante el término compromiso y compromiso literario, en concreto. Comprometidos estamos todos -escritores y no escritores-. Nuestra visión de la vida es ideológica, como nuestra manera de pensar y también nuestra escritura. Todos estamos comprometidos, aunque con diferentes compromisos. Hay compromiso de izquierdas y de derechas. El primer compromiso es con uno mismo y por eso cada escritor entiende su compromiso a su manera.

Traigo estas obviedades aquí a propósito de un libro: una Antología Poética publicada en Visor recientemente. La edición ha estado a cargo de las profesoras Remedios Sánchez, de la Universidad de Granada y Marina Bianchi, de la Universidad italiana de Bérgamo, que se ha encargado de seleccionar los poemas. Su título: Humanismo solidario. Poesía y compromiso en la sociedad contemporánea. Los nombres incluidos han sido elegidos entre los poetas firmantes del Manifiesto del Humanismo Solidario (suscrito por más de 600 escritores e intelectuales). La singular Antología ha surgido, pues, en el seno de ese movimiento, una propuesta que nació en Málaga y que fue adquiriendo mayor dimensión hasta estructurarse finalmente en el año 2013 en torno a un grupo de críticos, poetas y narradores. Entre otros, José Sarria, Alberto Torés, Manuel Gahete, Francisco Morales Lomas y Remedios Sánchez. ¿Cuál es el compromiso que nos propone el Humanismo solidario? ¿Con quién o contra qué se compromete?

La profesora Remedios Sánchez, que está realizando una labor cultural incansable desde la Asociación de Escritores Andaluces y también desde esta corriente solidaria, nos lo explica todo -y hay que felicitarla vivamente por ello- en un extenso prólogo en el que analiza tanto la poesía española desde los años 60 como, más sucintamente, la Hispanoamericana y la poesía en español escrita en el Magreb, exponiendo a su vez el pensamiento que sostiene al movimiento y su propuestas: en esencia nos propone unir, desde una heterodoxia estética donde quepan las diversas corrientes poéticas, todas aquellas voces de escritores "que sientan la necesidad de rebelarse contra los sistemas y organizaciones que oprimen y asfixian a la mayoría de la humanidad".

Sin olvidar que los poetas nos tenemos que comprometer ante todo con la buena poesía, es difícil en los tiempos que corren no sentir esa necesidad imperiosa de rebelión y esa solidaridad con nuestros semejantes.