Cuenca Mediterránea Andaluza, el organismo de aguas de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, entregó ayer las obras de la nueva estación depuradora de Ronda al Ayuntamiento de la localidad, después de que las instalaciones comenzaran a funcionar en período de pruebas en septiembre pasado.

En la propia depuradora, tras firmar el acta de recepción, el director en funciones de Cuenca Mediterránea, Antonio Rodríguez Leal, declaró que "se da un gran paso con este acuerdo, que pone fin a una deuda histórica que el Ministerio de Medio Ambiente tenía con esta ciudad". Éste recordó que las instalaciones funcionan a pleno rendimiento, "de manera correcta", y vertiendo ya aguas limpias al río Guadalevín.

Antonio Marín Lara, el alcalde rondeño, destacó "el enorme esfuerzo económico hecho por el Gobierno central, y el apoyo de la Junta", palabras que fueron correspondidas por Rodríguez Leal al advertir que "pocos Ayuntamientos ponen las cosas tan fáciles como el de Ronda", terminó.

En 1999 se inició este proyecto después de que en 1985 se clausurara la vieja estación existente en Padre Jesús. Desde entonces, las aguas sucias de la ciudad han ido a parar directamente al río. Han sido necesarios más de 21 millones de inversión estatal para dejar a punto unas instalaciones con capacidad para atender a 50.000 habitantes, mediante el tratamiento de hasta 14.375 metros cúbicos diarios.

Izquierda Unida denunció ayer que la recepción de la depuradora por parte del Ayuntamiento supondrá su automática cesión a la empresa Aqualia, concesionaria del servicio municipal de agua, lo que significará un incremento en la factura del agua. La empresa cobrará, por adelantado, el mantenimiento anual de las instalaciones, "lo que supondrá un incremento de un 70% de la factura en los primeros tramos, afectando esta subida a quienes menos gastan".