Unas obras que serían "imposibles" de acometer por los 150 operarios de la delegación de Obras, que "no dan abasto". De esta manera, la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (PP), explicó ayer por qué el Ayuntamiento va a sacar a concurso el Plan de Barrios por 1,3 millones de euros.

Se trata de un ambicioso proyecto cuya finalidad es el mantenimiento de "las propias infraestructuras de las barriadas, que acumulan graves deficiencias tras numerosos años de abandono". Así pues, la empresa privada que resulte elegida tendrá que acometer trabajos de "gran calado" en apartados como la conservación y mejora de los firmes urbanos, eliminación de barreras arquitectónicas, arreglo de alcantarillado y viales, mantenimiento de acerado, medianas, taludes y cerramientos, así como la ampliación, instalación y modificación de marcas y elementos de seguridad vial. Los arreglos también se llevarán a cabo en plazas, parques y paseos marítimos, según indicó la dirigente popular.

En cuanto a las funciones que tendrán a partir de ahora los empleados de Obras, señaló que intervendrán como "brigadas rápidas de actuación" para obras menores que requieran "una respuesta más rápida y urgente" porque supongan "un problema para el ciudadano". Marbella quiere así tener más adecentados todos sus barrios, aunque tenga que pagarlo doblemente.