Empaquetados y listos para ser enviados por mensajería. En esta situación encontraron los agentes del Servicio de Protección de la naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) dos ejemplares de pitón Abina, dos primates Saimiri, dos primates Tití y dos rapaces Lechuza Común. Todos estos animales exóticos estaban en el interior de las oficinas de una empresa de transportes y paquetería de Ronda y tenían como destino diferentes puntos de Portugal y España. El valor de estos animales ha sido calculado en unos 11.200 euros, que debían ser remitidos contra reembolso una vez que la mercancía llegase a su punto de destino. Los paquetes habían sido remitidos por un vecino de la localidad, cuya identidad se corresponde con las iniciales A. D. B.

La actuación del Seprona fue posible gracias a la información facilitada por un agente de la Policía Nacional, que había acudido a la empresa para realizar gestiones personales mientras estaba fuera de servicio. Cuando se percató de la presencia de los animales, alertó a los agentes del Seprona. Los animales exóticos se encontraban en el interior de diferentes jaulas, siendo alguno de ellos especialmente atractivos por su espectacularidad, como las pitones y las lechuzas.

Ahora, el autor de los frustrados envíos se enfrenta a una sanción administrativa, ya que la tenencia de este tipo de ejemplares no supone un delito. No obstante, tener este tipo de animales está prohibida. De hecho, únicamente se permite el poderlos tener en cautividad en establecimientos zoológicos. De momento, se desconoce el tiempo que los animales han podido permanecer en Ronda hasta que se ha concretado su venta y la procedencia de los mismos.