El primer kilómetro costero de Marbella está urbanizado en un 62 por ciento, casi el doble que en comarcas como La Axarquía y Málaga capital donde el 33 por ciento de los suelos han sido transformados en terrenos edificables, según revela un informe de sostenibilidad sobre la provincia.

Este estudio, elaborado por el Observatorio Provincial de la Sostenibilidad de la Diputación y la Universidad de Málaga, alerta del aumento de la superficie artificial en la costa malagueña durante los últimos diez años, donde más de 2.262 hectáreas de espacio forestal han pasado a ser suelos urbanizables.

La comarca de la Costa del Sol Occidental es en la que más suelos se han dedicado a actividades relacionadas con la ocupación, las infraestructuras y el turismo, mientras que la Serranía de Ronda es la que posee las mejores cifras de espacio forestal.

Otra de las cuestiones que se pone de manifiesto en el informe "Málaga Sostenibilidad 2007" es el incremento "disparatado" del consumo energético en la provincia, que ha subido un 32,2 por ciento en cinco años y se sitúa en siete puntos con respecto a la media andaluza.

Las áreas en las que se han experimentado las mayores subidas han sido la Axarquía, la Costa del Sol Occidental y Oriental, como consecuencia del auge del sector turístico y residencial.

El diputado de Medio Ambiente en la Diputación, Miguel Esteban Martín, ha avisado también de los efectos que puede provocar el cambio climático en la provincia como el aumento de las temperaturas o el descenso de la precipitaciones, lo que puede hacer mella en la economía y en el sector servicios.

Ha alertado también del agotamiento de los recursos hídricos y del aumento del consumo de agua, y ha precisado que el nivel municipal se situó en 239,2 litros por habitante y día.

En cuanto al medio natural, ha indicado que a finales de 2006 la superficie protegida en la provincia representaba sólo en torno a un 10 por ciento y que el 68 por ciento de las especies vertebradas están amenazadas, principalmente los mamíferos marinos, reptiles y aves.

En materia de residuos, el informe desvela que en Málaga se generan un millón de toneladas al año y que, en lugar de reducir, se ha incrementado su producción en un 53 por ciento.

Ante estos datos, el diputado de Medio Ambiente ha abogado por fomentar pactos de sostenibilidad y por crear una red de municipios sostenibles en la provincia.

Con este informe, ha dicho que, se reclama "una nueva cultura del territorio, un nuevo modelo energético y nueva cultura del agua basada en un uso más racional y eficiente".

"Este informe platea una foto de la provincia de Málaga enferma, que requiera de medidas urgentes para que recupere su estado de salud ambiental, su estado de salud social y su estado de salud económico", han aseverado.