Míchel quiere desparpajo de su equipo en Mestalla. El triunfo sobre Osasuna ha servido para que el Sevilla suelte lastre y vuelva a confiar plenamente en sus posibilidades y, además, todos los futbolistas de ataque están en plenitud de condiciones. Reyes, por ejemplo, se ejercitó ayer con total normalidad, después del susto que dio en Algeciras, donde se tuvo que retirar antes de que concluyera el encuentro amistoso doliéndose del hombro que tenía dañado. El utrerano participó en la mañana de ayer en una intensa sesión táctico-técnica de trabajo, con dinamismo y buen ánimo. Míchel puede contar con él, así como Kanoute, que demostró estar en un buen momento.

El entrenador madrileño, junto con su ayudante, Víctor Sánchez del Amo, dirigió ayer un entrenamiento en el que participó todo el arsenal ofensivo del equipo y trabajó con un amplio programa táctico en todas las facetas del ataque. Presión y movilidad, salida del balón desde atrás, centros desde las bandas con llegada de los medios centro, diagonales y disparos desde la frontal, juego combinativo con participación de los laterales... Míchel no dejó ni un detalle sin pulir en una sesión en la que participaron todos los jugadores que parten con la vitola de titular.

Míchel le dio a Reyes el rol de extremo izquierdo en los diferentes ejercicios y esto sumado al buen estado de Kanoute, que realizó remates de mérito, invita a pensar que no tocará un ápice el once del triunfo sobre Osasuna. Además, el técnico dedicó una parte de la sesión a trabajar específicamente con la defensa titular, mientras Víctor acentuaba la parcela ofensiva.