Con rostros de satisfacción comparecían los jugadores sevillistas en la zona mixta, tras un triunfo trabajado en el que se destacó el valor de los puntos por encima del juego.

"Sabíamos que iba a ser complicado y necesitábamos ser contundentes atrás. En el fútbol de hoy si dejas la portería a cero tienes el 80 por ciento ganado, porque arriba tenemos calidad. El resultado está en que apenas se nos acercan", comentó Fernando Navarro, que mantuvo su discurso de pelear con Madrid y Barcelona: "Intentaremos ser una alternativa a los dos grandes. Hay cuatro equipos por detrás con opciones si los otros fallan y nosotros tenemos que serlo. El vestuario piensa en recuperar para la UEFA y luego en el Málaga".

Uno de los más satisfechos era Palop, que entró en la historia del Sevilla al dejar un partido más la portería a cero: "No estaba pendiente del récord. Contento por esta marca y por entrar en la historia del Sevilla, pero lo más importante es la victoria y el debut de dos jugadores del filial. Estamos haciendo un buen trabajo defensivo, porque siete partidos a cero es muy difícil de conseguir. Intentamos defender fuerte porque arriba tenemos potencial".

De la misma opinión era Maresca, que explicó su enfado con el cambio y que ensalzó el valor de los puntos. "Hubo partidos en los que jugamos mucho mejor y no ganamos. Lo importante era conseguir los tres puntos. Más que enfadado por el cambio era el momento. A los segundos se me había ido y a pensar en el jueves", señaló el italiano, que no quiere hablar, de momento, de ganar la Liga: "Hace meses que no perdemos. Si este equipo va partido a partido lo podemos hacer bien; lo otro es complicarnos la vida".

Por último, Jesús Navas destacó el triunfo y explicó su error en el contragolpe: "Este triunfo era muy importante. No me quería perder este partido y era importante estar enchufados. Lo vi tan claro... Pero no me salió".