Dentro de dos días, el Sevilla disputa un partido de gran importancia en Mallorca, pero la actualidad de este equipo sigue pasando por las críticas al juego. Quizás por ello, Escudé, cansado de darle vueltas al asunto del fútbol frente a los resultados, sorprendió con un exhorto ante la pregunta de un periodista y echó la vista atrás.

¿Qué les diría a los aficionados que se quejan del juego?, le preguntaron al francés. Y éste contestó: "Que miren unos años atrás, cuando el club estaba en Segunda. Yo no estaba, pero veo a la gente orgullosa de su Sevilla, que sigue luchando por estar arriba. Que se disfrute de los títulos, pero que se recuerde de dónde viene el Sevilla. Que disfrute de un entrenador de la casa y de la gran plantilla que tenemos".

Antes, Escudé dio su opinión sobre el juego: "Yo intento sacar la pelota bien, pero cuando no se puede, no se puede. El juego no ha sido últimamente bonito, pero lo que importan son las cifras y los resultados, y el equipo está bien". El galo rechazó que el Sevilla jugara al balonazo: "Cuando aprieta el contrario, yo no voy a arriesgar, está claro, por eso jugamos largo, sólo tratamos de limitar los riesgos atrás". "Con jugar la final de la Copa, pasar a los cuartos de la Champions y terminar entre los cuatro primeros de la Liga, se habrán cumplido suficientemente los objetivos de la temporada. Y me da igual lo que se diga fuera, para mí lo importante es ver la sonrisa de los aficionados en otra final", añadió Escudé.