Caras largas por la derrota cosechada en Vallecas era lo que mostraban los futbolistas del Sevilla en la zona mixta, aunque las ocasiones generadas, sobre todo en la primera mitad, eran el argumento al que se agarraban para mantener la esperanza de poder pasar de ronda coper el próximo miércoles ante el Valencia.

Reyes, protagonista tras su primer partido después de su regreso, fue el primero en atender a los medios, comentando el motivo de su sustitución: "Me he ido con cansancio porque me ha dado un pinchazo atrás, pero no ha sido nada. Nos vamos con mala cara porque hemos perdido, aunque el miércoles tenemos otro partido y hay que pensar en él lo antes posible. El primer gol nos ha tocado la moral, pero hay que trabajar, porque tenemos un gran equipo y podemos remontar a cualquiera".

En lo referente a su adaptación, el utrerano fue más que contundente: "Cuando juegas con buenos jugadores es fácil adaptarse al equipo con rapidez. Yo me encuentro feliz y contento por ello, pero lo importante es que hemos perdido y nos tenemos que levantar".

Más larga fue la comparecencia de Escudé, capitán y autor del único tanto sevillista ayer, que no ocultaba el palo recibido por el vestuario: "Era importante darle la vuelta al marcador, y con el segundo gol se nos ha compicado mucho más. La ambición era ganar aquí y el primer gol nos ha hecho mucho daño". "Mi gol creo que dio un empujón de ánimo al equipo, porque quedaba bastante tiempo. Hemos dado demasiados balones largos, pero éste es un campo complicado. Es una pena, porque hemos luchado y nos ha faltado la suerte que ellos sí han tenido", añadió.

En cuanto a los repetidos fallos en la retaguardia, el defensa galo no ocultó que es algo en lo que se ha estado incidiendo en los entrenamientos, por lo que esas situaciones duelen mucho más: "Los fallos dejan muy tocado al equipo, porque queremos hacer las cosas bien, antes del partido hablamos mucho de evitar estas cosas, y encajar un gol así nos toca la moral a todos. Al menos, quedan muchos partidos y hay que luchar".

En cuanto al juego de ataque, destacó la presencia de Reyes en la parcela ofensiva: "Hemos tenido ocasiones y no hemos jugado mal. Reyes nos va a ayudar bastante en la elaboración del juego, pero atrás tenemos que estar mucho más seguros si queremos ganar partidos. Reyes conoce la casa más que yo, que llevo aquí seis años. Él está contento de volver y con su pierna izquierda y su experiencia va a aportar mucho".

Otro protagnista fue Coke, que regresaba a la que había sido su casa desde que comenzó en el fútbol: "Estoy contento por volver a mi casa de toda la vida, pero el sabor que me queda es que nos vamos muy jodidos. El otro día hicimos méritos para llevarnos un mejor resultado de Valencia y ante el Rayo también. La segunda parte ha sido nuestra, pero los fallos no nos han dejado remontar. En momentos puntuales la suerte nos está siendo esquiva, pero si las ocasiones que hacemos no son suficientes para ganar, pues tendremos que defender más y generar más ocasiones".

En cuanto al partido de Copa fue claro: "No queda otra que venirse arriba y ganar el miércoles como sea, salir a morder y meterle al Valencia los goles que hagan falta para salir de esta dinámica. Reyes va a ser muy importante en lo que queda", finalizó.