El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco decretó ayer el ingreso en prisión incondicional de cinco de los siete detenidos en la operación Ciclón contra el tráfico de drogas a los que ha tomado declaración hoy y ha dejado en libertad a los otros dos.

Según han informado fuentes jurídicas, uno de los cinco detenidos que envía a prisión es el futbolista del Rayo Vallecano Carlos de la Vega, al que se acusa de alquilar supuestamente las viviendas donde se recibía la droga y se preparaba su posterior distribución.

Los otros cuatro son el ex jugador del Hércules Pedrag Stankovic, los representantes de futbolistas Zoran Matijevic (presunto líder de la trama) y Pablo Acosta, y Juan Carlos Balbastre Peñarrocha, quien ya fue condenado en 2002 por narcotráfico.

Según la Policía, Carlos de la Vega y Pablo Acosta supuestamente actuaban en Madrid preparando la recepción de la droga y su posterior distribución, una labor en la que también participaba un ciudadano peruano detenido.

Éste último -C.F.R.C.- ha quedado en libertad junto a S.G., aunque el juez les ha impuesto comparecencias quincenales y la prohibición de salir de España.

Velasco, que adoptó esta decisión tras tomar declaración durante todo el día de ayer a los siete detenidos, acusa a los cinco que van a la cárcel de tráfico de drogas en cantidad de notoria importancia y banda organizada, aunque no se conocen más datos por estar la causa secreta.

Los otros cuatro arrestados en esta operación, tres en Valencia y uno en Alicante, serán interrogados por exhorto en los juzgados de estas localidades en los próximos días.

Velasco ha sido el encargado de practicar estos interrogatorios al estar de guardia esta semana y porque su compañero Baltasar Garzón (que ha dirigido la investigación) tiene un gran volumen de trabajo en su juzgado.

A partir de los arrestos, la Policía explicó que Matijevic, ciudadano de origen serbio pero de nacionalidad francesa y representante de futbolistas, era el líder del grupo y aprovechaba sus viajes de trabajo a Suramérica para coordinar operaciones de transporte de estupefaciente hasta Europa.

Para realizar esas gestiones se apoyaba en otras personas también relacionadas con el mundo del fútbol, como Stankovic, antiguo jugador en varios equipos españoles, entre ellos el Hércules de Alicante.

La organización contaba en Valencia con otras tres personas que trabajaban en las labores de preparación de la documentación necesaria para la importación del contenedor donde se escondía la droga.

Según los investigadores, los cinco arrestados pertenecientes al "mundo del fútbol" eran los encargados de recaudar el dinero necesario para la compra de la droga entre su círculo de relaciones a modo de "fondo de inversión".