El último había sido Dustin Hoffman, con Luck, una serie sobre el mundo de las apuestas y las carreras de caballos que llegará el próximo mes a España. Glenn Close reverdeció laureles en la pantalla de casa, con Daños y perjuicios, y la mayoría de las estrellas de Hollywood miran atentas a las posibilidades que les puede llegar de la televisión, medio del que en su momento surgió Michael Douglas (en los 70, con Las calles de San Francisco); o más recientemente George Clooney, con Urgencias.

La última gloria del cine en incorporarse a una serie será la versátil Shirley MacLaine, toda una veterana que viaja ya hacia Downton Abbey. La actriz de El apartamento o Irma la Dulce junto a Jack Lemmon, ahora da un paso hacia la televisión y hacia la premiada miniserie de la ITV del Reino Unido.

MacLaine intervendrá en Downton Abbey como el personaje de Martha Levinson, la madre de Cora, Lady Grantham (Elizabeth McGovern), procedente de Estados Unidos. La productora británica anunciaba ayer el estelar fichaje para la miniserie que luce el flamante Globo de Oro en la última edición (con Homeland, mejor drama; y Modern family, mejor comedia).

La tercera tanda de Downton Abbey, que emite en España Antena 3, transcurrirá en el tiempo de entreguerras, a principios de los años 20. El rodaje con MacLaine y el resto de elenco, de todas formas, no comenzará hasta dentro de un mes aproximadamente, por lo que las nuevas historias se estrenarán en el Reino Unido durante el próximo otoño, para llegar después a la cadena española, donde las tramas de la casa señorial gozan de buenos índices de audiencia. Esta tercera temporada podría ser la última.