Hoy se estrena en Movistar Series la octava temporada de Archer, la disparatada serie de animación sobre un incorrecto agente de inteligencia. En las siete temporadas anteriores se han visto situaciones de todo tipo como una convivencia laboral políticamente incorrecta, actuaciones muy poco honorables para un espía de su talla y una conducta cívica tachable en una organización gubernamental. Esta ficción fue creada para el canal FX Networks por Adam Reed, y gracias a su inteligente guión ha vuelto a ser nominada a los prestigiosos Premios Emmy a Mejor serie de animación. El año pasado fue candidata a este galardón por el episodio La agencia Figgis, compitiendo con titanes de la industria como Los Simpsons en su episodio Halloween de Horror y South Park con No estás gritando.

Esta nueva temporada, subtitulada Dreamland, con Jeffrey Tambor dando voz a Sterling Archer, toma la forma de una película de cine negro para sumergir al espectador en la mente del descarado espía, en una fantasía como detective privado en plenos años 20, y cargado de clichés para hacer sátira de los mismos con su típico humor negro y directo.

Las series de animación para adultos se están coronando como referentes de la industria audiovisual. Un producto que las productoras, una vez superada la polémica inicial, ven con interés. Series como Los Simpson, Futurama, Padre de Familia, Padre Made in USA e incluso South Park son suaves al lado de otras propuestas. Un ejemplo es Rick y Morty, la serie de animación para adultos creada por Justin Roiland y Dan Harmon que nació a raíz del corto Doc y Mharti, que parodiaba con ironía a los personajes de Regreso al Futuro. Sigue las desventuras de Rick, un científico alcohólico y que no tiene escrúpulos, y su influenciable nieto Morty a lo largo de su vida diaria y de los viajes intergalácticos.Otro ejemplo es Robot Chichen. La serie fue creada por el actor Seth Green, el mismo que dobla a Chris Griffin en Padre de Familia, y Matthew Senreich, empleando la técnica del stop motion. En su caso parodia situaciones típicas del mundo de la actuación. Happy Tree Friends, a pesar de su apariencia de serie infantil y colorida, es una sátira a la sutil violencia de Tom y Jerry o Rasca y Pica en Los Simpson. La ficción muestra con todo lujo de detalle las violentas muertes de sus felices personajes. Creada por Kenn Navarro, Aubrey Ankrum, Rhode Montijo y Warren Graff se ha convertido en un fenómeno de culto en la red. Harvey Birdman, abogado, creada por Michael Ouweleen y Erik Richter, parodia las situaciones legales norteamericanas de un elenco de antiguos superhéroes y personajes salidos de la productora Hanna-Barbera Productions con el desdichado Harvey Birdman a la cabeza.