Un 57% de los españoles ven televisión y películas a través de sus pantallas individuales, las tablets e incluso móviles, frente al 54,39% que prefiere ver el contenido en descargas en ordenadores portátiles, según revela la segunda oleada del estudio que la firma Paypal lleva a cabo sobre la economía de bienes digitales, y que analiza las actitudes, hábitos y comportamientos de los consumidores en los segmentos de vídeo y música a nivel global.

El informe revela que un 60,5% de los españoles entre 18 y 34 años prefieren el ordenador portátil para consumir televisión y cine sobre el televisor de siempre, siendo el único grupo demográfico que usa más el ordenador para consumir este tipo de contenidos. El estudio de Paypal incluye a 10.000 consumidores de diez países: España, Alemania, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Polonia, Reino Unido y Rusia.

Un 60,5% de los jóvenes españoles prefieren el portátil antes que el televisor

Este informe detalla que España (51,75%) es el único país del estudio en el que los servicios en streaming (visionado bajo demanda en tiempo real a través de aplicaciones o plataformas) son menos habituales que las descargas en la industria del vídeo.

Los países que encabezan este ranking de consumo en streaming, con plataformas tan veteranas como Amazon, HBO o Netflix, son Estados Unidos (75,3%), Emiratos Árabes Unidos (65,3%) y Reino Unido (64,8%). La irrupción en España de servicios de TV on line irá aumentado este aspecto. La influencia de Movistar +, el principal operador del servicio de televisión de pago, se intuye cada vez más potente.

En relación con el consumo de música, en términos generales la investigación apunta que el 94% de los españoles lo hace a través del móvil, y un 75,3% de los usuarios pagan por escuchar música en streaming, con una diferencia de casi el 30% respecto a las descargas. Esto se debe al gran volumen de música disponible en plataformas de streaming como Spotify (77%), así como a su diversidad de contenido (opinión en un 65%).

El informe concluye que España se alza como el país con un precio de gasto mensual más elevado en compras de bienes digitales en general (46 euros), seguido de Alemania (43 euros) y Francia (40 euros).