Palma de Mallorca fue declarada ciudad antitaurina en el Pleno celebrado ayer en la capital balear. El acuerdo fue aprobado con los votos a favor de los grupos que conforman el equipo de gobierno: PSIB (Partido Socialista Obrero Español de las Islas Baleares), Som Palma (Podemos) y MÉS (Coalición del Partido Socialista de Mallorca, Entesa por Mallorca -nacionalistas- e Iniciativa de los Verdes); mientras que Ciudadanos y PP votaron en contra de que la ciudad sea declarada antitaurina.

Como ya sucedió en la votación para la prohibición de los toros en Barcelona, el voto de los socialistas ha sido decisivo. Los socialistas también han votado durante este mes contra la Fiesta en varias poblaciones españolas tras aliarse con grupos secesionistas tras las últimas elecciones autonómicas. El PSOE, junto a los otros grupos, tiene la intención de presentar una propuesta al Parlamento Balear para suprimir las corridas de toros en todo el territorio, así como los correbous.

El Partido Popular y Ciudadanos se han mantenido contrarios a la prohibición y mostraron su apoyo a la Fiesta de los toros.

El Partido Popular manifestó: "Palma ama la Tauromaquia y creemos en el respeto y la libertad. Vamos a votar por todas esas personas que creen en la libertad. La única propuesta en materia social del PSOE es declarar Palma antitaurina. No entendemos que lo primero que hagan los partidos de izquierda al llegar al gobierno es declarar Palma como antitaurina".

Ciudadanos aseveró: "Palma tiene otras necesidades, como los desahucios, como los niños que pasan hambre. Nosotros entendemos que hay cosas más importantes y por sentido común no apoyamos la moción. Desde Ciudadanos creemos que los Toros son una tradición en España y en nuestra isla. La primera plaza de toros de Baleares fue en nuestra ciudad".