Vino a Huelva a recoger el trofeo que la Junta de Andalucía le había otorgado por su única actuación en la plaza serrana de Zufre pocos días antes de que la novillera sufriera en las Ventas probablemente el más serio percance de su carrera.

-¿Qué ofrece para cualquier torero la temporada española?

-Sobre todo profesionalidad. Aquí es todo más riguroso y exigente y se siente más la presión de la profesión, aunque tanto aquí como en mi país, el toro siempre me brinda la posibilidad de disfrutar mucho.

-Con Antonio Picamills de apoderado desde que se decide venir a España...

-Bueno, el señor Picamills tuvo oportunidad de verme allá en mi tierra y supongo que algo de interesante vio en mi forma de expresarme ante el novillo que me propuso el apoderamiento y creo que fue un acierto aceptar.

-Supongo que sin antecedentes de ningún tipo, la familia no lo pondría fácil .

-Pues fácil desde luego que no. Mi padre es un gran aficionado, pero nunca antes hubo un torero en mi familia. De todas formas, ellos saben que así soy feliz y de verdad que siento su apoyo.

-¿Qué ha venido a significar este premio como mejor novillera de la temporada en Huelva?

- Más que nada un a inmensa satisfacción porque es un premio muy importante y, además, por ser inesperado, me ha hecho mucha ilusión el recibirlo.

-¿Una plaza donde soñar?

-Cualquier plaza es siempre una oportunidad pero, si debo elegir, me quedo entre Sevilla y Madrid .