El Unicaja consiguió un angustioso pero valiosísimo triunfo (74-67) ante el Valencia Básket para seguir vivo en la carrera por ir a la Copa del Rey. 7-7 de balance y en octava posición actualmente, el Unicaja supo vencer a sus nervios. Se detectó cierta ansiedad en el equipo de Plaza que impidió plasmar la diferencia entre los dos equipos. Las bajas rivales merman su potencial, sin menoscabo de la calidad de los sanos. Pero se nota.

Como suele con cierta frecuencia, Rafa Martínez capitalizó el ataque del Valencia para golpear al Unicaja. Tres triples en el primer cuarto y uno más en el segundo para liderar la ventaja de su equipo (20-21). McCallum tuvo una buena ráfaga de tiro exterior, pero el rival estaba por delante.

El Unicaja estaba combativo y parecía superior a su rival, pero el marcador no engañaba. Tuvo varios momentos para romper hacia una diferencia mayor (30-25, 38-32, 42-37), pero el Valencia se aguantaba en el partido. Aparecía Dubljevic, después Van Rossom, incluso el joven Puerto (18 años), del que Vidorreta tiró para dar profundidad a una plantilla lastrada por seis lesiones. 42-41 mandaba al descanso el cuadro malagueño, exigua renta para lo que se había visto.

Pero el Unicaja no había optimizado superioridad. Buenos minutos de Alberto Díaz, Carlos Suárez, aun sin anotar, y Dani Díez, con elevación del ritmo defensivo. 15 asistencias repartía el Unicaja al descanso, moviendo bien el balón. Atrás estaba la clave aunque Nedovic tenía mucho margen de mejora

La sensación era que el Valencia se había escapado vivo, pero el mago serbio salió enchufado desde el vestuario y así fluye más fácil el juego. Encontró espacios el Unicaja para sumar tiros y ensartó tres triples (Nedovic, Waczynski y McCallum) para que se disparara en el marcador y obligara a un tiempo muerto de Vidorreta (57-47).

Colapsó ahí el Unicaja. Perdió demasiadas oportunidades el equipo malagueño para irse. Aguantaba la renta (57-51) al final del tercer cuarto, pero cinco minutos sin anotar permitieron un parcial de 0-10, con dos triples de Doornekamp (57-57). Los dos equipos se guardaban balas para el final y tampoco parecía haber muchas piernas. Había más responsabilidad del Unicaja, bastante más, no había colchón.

Punto a punto, el Unicaja empezaba a despegarse de nuevo. Shermadini, harto de pedir balones sin que se le viera, metió. También un tiro libre de McCallum. Y un monumental triple de Nedovic desde 11 metros, pisando el círculo central, cuando acababa la posesión (68-61). Volvía a tener opciones de despegarse el Unicaja, pero las erraba. Y, en un dejá vu, volvía Valencia. Otra vez el Unicaja con malas decisiones en ataque, otra vez con dudas. Atrás tenía un salvavidas, pero no se metía y Van Rossom volvía a poner al equipo taronja a sólo un punto (68-67). Waczynski metió dos tiros libres capitales, Rafa Martínez falló el triple para empatar tras un error calamitoso defensivo de Nedovic y el catalán le hizo una antideportiva al serbio, que sentenció desde la línea de personal. Waczynski remachó y el Carpena celebró una victoria realmente capital.

Unicaja (20+22+15+17) 74: McCallum 11, Nedovic 14, Waczynski 11, Brooks 3 y Augustine 8 -quinteto inicial-. Díaz 2, Salin 5, Díez 9, Shermadini 9 y suárez 2.

Valencia Básket (21+20+10+16) 67: Van Rossom 14, Martínez 14, Doornekamp 6, Thomas 7 y Dubljevic 11 -quinteto inicial-. Puerto 2, Abalde 5, Rudez 0 y Green.

Inicdencias: 13ª jornada de la Liga Endesa. Encuentro disputado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena. 7.645 espectadores en las gradas.