Kenan Karahodzic cumple su primera temporada como cedido en el Partizan de Belgrado. El canterano del Unicaja, llegó con 15 años para integrar el equipo cadete y se marchó con 20 para foguearse en Serbia, ha sufrido un parón en su evolución en los dos últimos meses y medio. Durante el partido de la FIBA Champions League con el PAOK de Salónica, a principios de febrero, en una jugada fortuita un rival le metió el dedo en el ojo. Afectó a la tensión en el órgano y el jugador bosnio sufrió pérdida de visión y fuertes dolores de cabeza. El tratamiento consistía en reposo absoluto y una medicación fuerte, por lo que durante más de un mes ha estado parado, sin poder realizar ejercicio físico.

Karahodzic por fin se ha recuperado y hoy volverá a jugar en el comienzo de la fase final de la Liga de Serbia, en la que compiten ocho equipos, con la incorporación de los que han jugado en la Liga Adriática, como el Partizan. El equipo serbio se quedó en las semifinales y ahora tiene una oportunidad de competir por el título nacional con el Estrella Roja, dominador en las últimas temporadas. Comienza hoy con el Vrsac, equipo de grato recuerdo para el Unicaja porque ante él ganó el club malagueño el primer título de su historia.

Karahodzic ha jugado más en la Champions League, 12 partidos con12 minutos de media, que en la Liga Adriática (10 con poco más de siete). El Unicaja ha seguido su evolución y tiene la opción de recuperarle este verano para que engrose y dé profundidad a la plantilla de la temporada 2017/18.