La conexión serbia formada por Nedovic y Musli selló a cuatro manos el triunfo del Unicaja sobre el UCAM (88-76). El fin de la primera vuelta dejó un triunfo en el Carpena ante el disminuido equipo murciano, que pese a las bajas no se rindió, incluso cuando el Unicaja dominaba por 24 puntos al inicio del tercer cuarto. Obligó a que Nedovic se desatara en los minutos finales para evitar problemas. Un ejemplar tercer cuarto, en el que se condensó la mejor versión posible del equipo de Joan Plaza, es una ventana para ser optimistas de cara a los excitantes meses que vienen. Balance de 10-6 tras la primera ronda, queda la sensación de que pudo ser mejor y que se pudo ser cabeza de serie de Copa, pero no hay nada irreparable. Llega ahora el segundo tramo de la competición, lo más decisivo, y Omic debe elevar el nivel.El primer tiempo fue espeso, costó hacer fluir el ataque del Unicaja, que después sí se acabó soltando hasta sumar 28 asistencias, el tope de la temporada. En defensa, Díaz y Suárez sostienen al equipo, le dan un fondo rocoso que sin ellos no se adivina. El reto de este equipo, se ha repetido, pasa por crecer atrás, por una constancia que permita aumentar aún más la capacidad para correr. Reúne el Unicaja ingredientes para ser un equipo temible, salvaje, a campo abierto. Pero aún no se ha llegado a ese punto de solvencia defensiva ni de control del rebote. Y la duda, razonable, es si se alcanzará. Por ahí tiene un camino para ganar minutos Dani Díez, que en los rechaces hace más seguro al equipo cuando él está en pista. Tuvo grandes minutos en el segundo cuarto, cuando el Unicaja obtuvo su primera ventaja tras un inicio dubitativo (15-15 al final del primer cuarto), en el que Nedovic y Musli ya avisaron de sus intenciones sosteniendo al equipo.Se escapó el Unicaja con Díez de protagonista (29-22), devolvió el UCAM un parcial de 0-8 y se cerró la primera mitad con un 6-0, con Musli abusando de Delía en el poste bajo. Ante rivales de este calado es absolutamente dominante el serbio. Su reto es serlo también ante equipos del máximo nivel. Igual la llegada de Omic le puso las pistas, también es cierto que ha podido entrenar mejor tras dos semanas casi parado. El caso es que con él como referencia se llegó con cinco puntos de renta (35-30).Tiene gran dependencia de Campazzo el UCAM. El Unicaja supo controlar durante varios tramos al peligroso argentino. Pero hay pocos antídotos para una versión de Nedovic como la de ayer, completa. Dio siete asistencias (14 en los dos últimos partidos). El Unicaja equilibró su juego con Musli como contrapeso. Omic debe ser otra piedra ahí para equilibrar la balanza. Y el equipo de Plaza bordó el baloncesto durante 10 minutos, con todos los mecanismos engrasados. Coincidieron una buena defensa para correr, la impotencia del UCAM para mantener el ritmo y el buen tino exterior para complementar a Musli. El resultado derivó en 31 puntos a favor en el cuarto para quebrar el partido. Un triple de Waczynski permitió rebasar la renta de los 20 puntos (63-42).Ya en el cuarto final, un tres más uno de Fogg extendió la renta hasta los 24 puntos (72-48). Llegó la relajación, el turno para el show de Campazzo, que le dio vidilla al partido junto a una defensa agresiva, al límite de la falta, ante la que los árbitros hacían la vista gorda (82-72). Nedovic, con dos triples y una entrada plástica que sólo él sabe hacer, tranquilizó. Y remachó con un mate y un tapón para dejar claro que la conexión serbia está de vuelta.

Ficha del partido

Unicaja (15+20+31+22) 88: Díaz 2, Nedovic 17, Waczynski 11, Brooks 12 y N'Diaye 0 -quinteto inicial-. Okouo 0, Fogg 8, Díez 10, Smith 9, Suárez 0 y Musli 19.

UCAM Murcia (15+15+18+26) 76: Campazzo 22, Baron 22, Rojas 5, Antelo 7 y Delía 9 -quinteto inicial. Benite 0, Llompart 0, Radovic 4, Olaizola 0 y Pocius 7.

Árbitros: Pérez Pérez, Bultó y Munar.

Incidencias: 17ª jornada de la Liga Endesa 2016/17. Partido disputado en el José María Martín Carpena ante 6.237 espectadores.