El Unicaja presentó este martes a Dragan Milosavljevic. Fue el primer fichaje del verano, pero el hecho de que tuviera que hacer una visita relámpago para firmar y que Serbia fuera finalista del Eurobásket propició que fuera el último en posar con la camiseta del Unicaja. Llevará el número 12, "el de la suerte, el que me gusta".

Milosavljevic (28 años y 1.98 metros) firmó por dos temporadas con el Unicaja y mostró su ilusión por enrolarse al proyecto malagueño. "Estoy muy feliz de estar aquí, por formar parte de un club de gran tradición como el Unicaja. Jugué aquí el año pasado con el Alba, me gusta el ambiente, la ciudad, lo que rodea al baloncesto, espero que sea un año exitoso. Jugar en Euroliga es muy estimulante, pero es una competición dura, especialmente en el formato que se puso el año pasado", dijo el serbio, que piropeó la competición doméstica: "Desde luego, la Liga Española, que es muy posiblemente la mejor de Europa, también atrae. Tenemos un buen equipo, un buen entrenador y tenemos mucha esperanza de que podamos ganar algún trofeo y llegar lo más lejos posible en la Euroliga".

"Jugué contra el Unicaja y conozco el club y los jugadores. Mi amigo Dejan Musli de Serbia me dio buenos informes. Sigo la NBA y mi amigo Boban Marjanovic jugó con Ray McCallum en San Antonio. Hay grandes personas, hay gran personalidad. Vamos a hacer grandes éxitos, estoy seguro", fue el ambicioso mensaje de Milosavljevic, que explicó dónde se desenvuelve mejor: "Mi posición natural es 2-3, pero puedo subir el balón como base y mandar el ataque, si hay presión puedo ayudar al base del equipo para que pueda jugar al equipo".

Sobre lo que le dijo Joan Plaza, Milosavljevic bromeó: "Eso es secreto (risas). Lo más importante es la defensa, no sólo para mí sino para todos. En ataque, ser agresivo, crear para el resto y atacar el aro".

"La Supercopa fue sólo un partido, no empezamos muy bien, pero después nos ajustamos al Valencia y fue mucho mejor. Lo único malo es que quizá no nos conocíamos muy bien aún, había muchos jugadores con la selección. Nos conoceremos mejor cada vez", asegura Milosavljevic, que tuvo las mejores referencias de sus compatriotas: "Nedo adora Málaga, es su segunda casa tras Belgrado. Me habló de gran organización del equipo, del club. Que hay que llegar arriba. Y que el coach trabaja para que mejore cada jugador".

Milosavljevic explicó una curiosa anécdota después de soltar algunos términos en español. "Desde pequeño veía telenovelas con mi madre. Hablo un poquito, espero pronto hacerlo bien".

Sobre su participación en el Eurobásket, donde alcanzó la medalla de plata con un rol más defensivo, Milosavljevic dijo que "fui a jugar con los mejores. En un torneo así no te puedes relajar en ningún momento, estoy orgulloso de la medalla de plata que conseguimos. En el equipo mi rol era diferente, tenía que defender, espero mostrar aquí en las dos partes de la cancha de lo que soy capaz".