solidaridad

El comedor de los milagros

  • La ONG Ángeles de la Noche pone en marcha una iniciativa para ofrecer el almuerzo diario a los niños más necesitados durante el mes de julio

Llegó julio, las deseadas vacaciones de verano para los más pequeños y el cuelgue de los libros hasta el curso que viene. Pero lo que para los niños es probablemente la mejor época del año, para muchos padres se convierte en una larga cuesta arriba en la que poder darle de comer a sus hijos a diario es su máxima prioridad. El fin del comedor escolar, gracias al cual los menores con más necesidades tienen garantizada al menos la comida principal diaria, supone un duro varapalo para los que viven con lo justo y la ONG Ángeles de la Noche de Málaga ha hecho una apuesta decidida para que dentro de sus posibilidades para que ningún niño se quede sin comer este mes.

Ayer fue el primer día y la primera vez que esta asociación puso en marcha su particular comedor escolar en las instalaciones, ubicadas en el entorno de la explanada de Santo Domingo y en las que desde hace más de un año atiende diariamente a unas 400 personas. Nunca había dado una atención concreta a los más pequeños, pero es una idea que llevaba rondando en la cabeza de Belén Leiva, la cocinera de Ángeles de la Noche y la responsable en gran medida de obrar el milagro diariamente.

Si vienen sólo tres niños pues tres niños y sus madres que no se quedan sin comer"Belén LeivaCocinera de la ONG

"El año pasado no pudo ser y este año me propuse hacerlo sí o sí", aseguró ayer y vaya si lo consiguió. Ayer fue el gran estreno de esta iniciativa que le honra y con la que no pudo reprimir las lágrimas al ver entrar a las 13:00 horas a los pequeños acompañados de sus madres que fueron en busca de su plato de comida.

No fueron tantos como esperaban porque como explicó "los colegios de la zona no han querido colaborar y al final tuvimos que hablar con los padres que ya vienen durante el año para darles esa opción". Pero aunque pocos , la satisfacción de Belén y de las tradicionales voluntarios no pudieron reprimir su satisfacción de ver sentados a la mesa a los niños.

Un menú muy completo que la mayoría no pudieron ni siquiera terminar. Potaje de habichuelas, arroz con tomate y lagrimitas de pollo, plátano, chocolatinas, zumo y agua para los más mayores, y puré de verdura y yogur para los bebés. Mesa de lujo, con vajilla incluida, para recibir a sus invitados más ilustres.

Madre de cuatro hijos, la pequeña de apenas seis meses, Belén sabe bien lo que cuesta alimentar a una familia y "si vienen sólo tres niños pues tres niños y sus madres que no se quedan sin comer". Una de ellas, que prefirió no dar su nombre, lleva .tiempo yendo diariamente a Ángeles de la Noche a por su almuerzo y la cena de los niños. Con tres hijos de 1, 5 y 8 años, sin trabajo estable y sin ayuda de nadie, la ONG se ha convertido en su refugio. Ayer fue por primera vez con sus hijos al comedor que le dará un respiro este verano porque "sin colegio y sin comedor con tres es imposible y el todo", señaló esta joven que trata de ir tirando cuando le sale algún trabajo como limpiadora de casas.

También una de las voluntarios acompañó ayer a su nieta de 3 años en su primer día de comedor. Su hija, sin trabajo y embarazada de nuevo, ha visto en esta iniciativa una manera de aliviar el verano. "Ahora no llega y menos mal que aquí nos ayudan con pañales, toallitas, leche y potitos", explicó.

De lunes a viernes durante todo el mes de julio, al menos, la comida, no será desde luego un problema para las familias que acrediten no disponer de ingresos. Hasta casi 200 niños podrían atender diariamente y confían en que "corra la voz y los próximos días vengan más", contó María José López, otra de las voluntarias históricas de una asociación que va tirando gracias a la colaboración de los más solidarios.

Pero toda ayuda es poca y sólo los gastos que deben asumir de alquiler del local, gas, luz y agua se come los ingresos de esta ONG que apenas recibe ayuda de las instituciones y que atiende cada vez a más usuarios. El próximo 28 de julio cerrará sus puertas hasta el 1 de septiembre. Pero no dejará desatendidos a sus fieles y repartirá para cada uno un lote con los productos básicos que necesitarán durante el mes de agosto. La solidaridad no entiende de vacaciones.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios