Elecciones generales

C's advierte que la candidatura de Pelayo dificultará un pacto con el PP

  • El Supremo investiga a la ex alcaldesa de Jerez por su vinculación con la Gürtel. Los populares defienden que no está imputada.

Llevaba el PSOE semanas calentando el ambiente. Advirtiendo de la posibilidad de que el PP incluyera nombres relacionados con tramas de corrupción en sus listas de candidatos al Congreso. Alertando de que esto evidenciaría el doble discurso de los populares. Pero ha sido en Ciudadanos donde más se han sorprendido por la inclusión de la ex alcadesa del Ayuntamiento de Jerez como número dos en la candidatura por la provincia de Cádiz.

García-Pelayo tiene abierta una causa en el Tribunal Supremo por un presunto delito continuado de prevaricación administrativa y otro de falsedad en documento público en relación con determinados contratos administrativos realizados para Fitur 2004. No está imputada por su carácter de aforada como senadora. Lo seguirá siendo incluso cuando se disuelvan las Cortes, ya que en septiembre su partido la inscribió en la diputación permanente de la Cámara alta, esa misma que el partido que lidera Albert Rivera quiere eliminar.

Al PP no han parecido importarle las numerosas ocasiones en que C's ha afirmado que nunca llegará a un pacto de gobierno con un partido con imputados en sus filas. Ni tan siquiera cuando las últimas encuestas presentan a la formación naranja como la pieza clave para lograr un gobierno estable, tanto tendente a la derecha como a la izquierda.

Aunque esa tajante declaración también tiene sus vías de escape. En Andalucía, durante la campaña de las elecciones autonómicas, Rivera insistía en que no hablaría con Susana Díaz hasta que expulsara a los ex presidentes José Antonio Griñán y Manuel Chaves por su vinculación a la trama de los ERE. También aforados en ese momento. Pero luego, en junio, apoyó la investidura de Díaz como presidenta de la Junta mientras Chaves mantenía su escaño.

Ahora, fuentes de C's advierten de la "dificultad de alcanzar cualquier acuerdo con el PP" si Pelayo es diputada, algo más que probable al partir como número dos -el PP logró cinco escaños en las pasadas elecciones-, sólo por detrás de la ex alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez.

El PSOE también ha mostrado ya su rechazo a esta decisión. Su secretario de Organización, Juan Cornejo, afirmó ayer que la inclusión en las listas del PP de una persona investigada por el Supremo por su supuesta relación con la trama Gürtel es un ejemplo de "ley del embudo y la doble vara de medir" de los populares.

El PP, por su parte, defendió a su candidata. Antonio Saldaña, secretario general en Cádiz, aseguró que las críticas a Pelayo están fundamentadas en que "les fastidia el tirón social y apoyo ciudadano que tiene" e insistió en que "no está imputada y ha solicitado por dos veces el acudir a declarar de manera voluntaria".

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