La presidenta andaluza, Susana Díaz, ha informado de que ha pedido una entrevista con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y una reunión con la Comisión Europea (CE), al considerar que "ha llegado la hora de soluciones de verdad" y que es necesario que España y Europa "miren hacia las regiones del sur". Díaz ha hecho este anuncio durante su intervención en un almuerzo-coloquio organizado en Sevilla por el Foro Joly Andalucía patrocinado por Unicaja, en el que ha detallado que ha remitido en los últimos días al Gobierno central "un primer paquete de proyectos" por valor de 13.000 millones de euros, con el que pretende mejorar el capital físico, humano y tecnológico de Andalucía, dentro del plan de impulso económico para movilizar 315.000 millones de euros anunciado por el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker.

En concreto, se ha referido al corredor ferroviario de la costa del Sol, la conexión de los ejes central y mediterráneo con Algeciras; los transportes metropolitanos; la eficiencia energética; la modernización del mundo rural, y proyectos importantes para la educación, la salud, el turismo y la cultura, entre otros. "Le he pedido una entrevista al señor Rajoy, espero que esta vez -ya que se acuerda tanto de mí- me la conceda", ha señalado Díaz, que ha reclamado "soluciones de verdad" tras advertir de que se le está "echando gasolina al fuego de la indignación social", lo que "acarrea consecuencias para el sistema democrático" en un país en el que se está "aniquilando" a las clases medias.

En la misiva, facilitada a los medios de comunicación por la Oficina del Portavoz del Gobierno, solicita una reunión a Rajoy "para establecer conjuntamente las prioridades de Andalucía ante el escenario de inversión que se plantea desde Bruselas". En concreto, Díaz recuerda que se abre un nuevo horizonte en la Unión Europea después de que Juncker haya anunciado la puesta en marcha de un plan de impulso económico que pretende movilizar 315.000 millones de euros a partir de una inversión pública de 21.000 millones. Dicha iniciativa, a juicio de Díaz, supone "una oportunidad para combatir, desde la colaboración de todas las administraciones, el problema del paro y la brecha de la desigualdad, que se han ensanchado entre el norte y el sur de Europa como consecuencia de la crisis económica". "Es evidente que una comunidad autónoma no puede combatir sola el desempleo, y menos cuando éste, como en el caso de Andalucía, alcanza magnitudes inaceptables", ha señalado Díaz, que ha argumentado que el diferencial con España es "crónico" y, por ello, ha reclamado al Gobierno de la nación de manera reiterada -recuerda- un plan extraordinario de empleo.

En la carta también recuerda al presidente del Gobierno que, desde que llegó a la Presidencia de la Junta, su prioridad ha sido la creación de empleo, para lo que se han movilizado en este año unos 1.000 millones de euros, pero que es evidente que la comunidad autónoma no puede "combatir por sí sola" una cifras tan "insoportables" de paro. Recuerda a Rajoy que su Gobierno le ha reclamado de manera reiterada un plan extraordinario de empleo en esta comunidad, sin que haya obtenido respuesta.

"Maltrato a Andalucía"

La presidenta también ha indicado que mientras Andalucía ha cumplido con España, el Gobierno central no ha cumplido con esta tierra, que ha sufrido un claro "maltrato fiscal", mientras que otras comunidades han tenido una financiación privilegiada. En este punto, ha aprovechado para volver a reclamar al presidente del Gobierno que abra el debate sobre una nueva financiación autonómica, ya que, al no hacerlo, "incumple" tanto la ley como su propia palabra. "No es comprensible que quien tiene que garantizar el derecho de todos los españoles a la igualdad, se desentienda olímpicamente de ello", ha expresado Díaz en referencia a Mariano Rajoy. A su entender, es necesaria más financiación ordinaria y menos mecanismos extraordinarios, esto es, "más soluciones estructurales y menos parches".

Susana Díaz ha señalado que en Andalucía se está demostrando que es posible gobernar de otra manera, frente a esa política "recalcitrante de austeridad a ultranza" del Ejecutivo del PP que traído desempleo masivo y aumento de la desigualdad. A su juicio, es incomprensible que alguien no entienda el factor de estabilidad que supone Andalucía en el conjunto de España. Ha señalado que hacerle daño a Andalucía es hacerle daño a España. Para Díaz, la estabilidad y la concordia es exigible a quien tiene la obligación constitucional de articular al conjunto de nación y esa responsabilidad recae en el Gobierno central y en su presidente, al que no ve que se esfuerce mucho en ese sentido.

Durante la conferencia, Díaz ha anunciado que la Junta va a transferir a los ayuntamientos, antes de final de año, 200 millones de euros para "mejorar su liquidez", aunque ha subrayado que las deudas son "mutuas" y las corporaciones locales también "deben" a la Administración autonómica.

"O actuamos con determinación o la corrupción será un lastre demasiado pesado"

La jefa del Gobierno andaluz se ha referido también al problema de la corrupción para advertir: "O actuamos con determinación o se va a convertir, si es que acaso no lo es ya, en un lastre demasiado pesado de nuestra democracia". "Yo sí creo en los acuerdos, pero no en el cambalache ni en el pasteleo, propongo que cambiemos el chip y alcancemos acuerdos sobre los hechos: Si alguien adopta alguna medida ejemplar contra la corrupción, los demás deben aplaudirla", ha remachado. Por ello, ha reconocido que "buena parte" de las medidas que volvió a anunciar el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, la pasada semana son "acertadas, aunque tardías y claramente insuficientes", y ha añadido: "Me gustaría que alguien alguna vez reconociera que en Andalucía hemos adoptado medidas de gran rigor y de apuesta decidida por la transparencia".

Ha opinado que "hay un problema como país" porque "desgraciadamente hay quien se ha aprovechado de lo público". Así, se ha se quejado de que se haya hablado, por ejemplo, de la corrupción en los cursos de formación en Andalucía cuando "resulta que estaba pasando lo mismo en Galicia, en Valencia, Baleares y Asturias", ha sostenido. Sobre si cree que hay una "causa general" contra la Junta de Andalucía, ha precisado que como presidenta sabe lo que hay que hacer "y es poner transparencia porque es la mejor lejía contra la corrupción". Tras recordar algunas de las medidas puestas en marcha por su gobierno en este ámbito, ha recordado que al inicio de su mandato dijo que abriría "puertas y ventanas" y "ya -ha recalcado- estoy tirando muros".

"Yo sé lo que tengo que hacer y que la Justicia haga lo que tenga que hacer", ha añadido Díaz", que interpelada sobre si no cree que en el caso de los ERE "fallaron también los que tenían que vigilar a los cuatro golfos" de los que se habló en un principio, ha reconocido que "lo que pasó fue grave" y ha añadido: "Yo pedí perdón a los andaluces cuando todavía no era ni consejera".

La presidenta andaluza ha subrayado que cree en la "honestidad" de sus antecesores en el cargo, José Antonio Griñán y Manuel Chaves, y ha lamentado que se estén "viendo metidos en el mismo saco de los que se han aprovechado de lo público". "Yo creo en la honestidad y la decencia de Griñán y Chaves -cuya supuesta implicación en el caso de los ERE está investigando el Supremo- y creo también que se está confundiendo la responsabilidad política con la comisión de un delito, aquí no se han enriquecido ninguno de los dos", ha recalcado. Sobre si cree que las responsabilidades políticas en el PSOE y en la Junta están ya depuradas, ha indicado: "hoy me han presentado aquí como una presidenta que accedió porque José Antonio Griñán se fue como consecuencia del caso de los ERE". A continuación y, ante la insistencia en la pregunta, ha respondido: "Cuando hable el Supremo, hablaré yo".

Tras señalar que la Justicia tiene que ser "rápida" para ser "justa", la jefa del Gobierno andaluz ha recalcado que la responsabilidad política es una cosa y la comisión del delito es otra, por lo que hay que distinguir "entre quien no se ha enriquecido y ha actuado en el marco de sus responsabilidades pero se están viendo metidos en el mismo saco de los que se han aprovechado de lo público".

"El PSOE no se puede acomplejar con Podemos"

Díaz ha hecho un análisis de la realidad española, apuntando que, sin duda, las cosas están mal, como se puede percibir en la calle, y es necesario reconocerlo para poder plantear soluciones. "No esperen de mi un análisis complaciente o ilusorio", ha dicho la presidenta, para quien negando la realidad se hace un "flaco favor a la democracia". A su juicio, los políticos "estamos fallando a la gente", porque no arreglamos sus problemas y, en muchos casos, damos un "mal ejemplo" a la sociedad. Díaz ha indicado que ella tiene tres cosas claras ante esta situación, que hay que poner medidas en marcha para solucionar problemas; denunciar las políticas que nos conducen a esa situación, y rechazar el ilusionismo que no conduce a nada bueno. Ha apuntado que el camino tampoco es desentenderse de la obligación de cualquier administración por mantener el equilibrio presupuestario.

Díaz ha manifestado también que el PSOE tiene que defender lo que cree que es bueno para España, al margen de lo que defiendan fuerzas políticas como Podemos. Ha dicho que no ve a su partido, que "no se puede acomplejar con nadie", pactando ni con el PP ni con Podemos.  Sobre si el PSOE ha contribuido al auge de Podemos, ha señalado que el malestar que hay actualmente en la sociedad ha alimentado ese tipo de "fenómenos". Ha estimado que quien más ha contribuido al malestar ciudadano han sido las políticas del Gobierno del PP, que han generado mucho daño y desigualdad, con un claro debilitamiento de las clases medias. A su juicio, el "cóctel explosivo de paro, corrupción y desigualdad es el que está alimentando fenómenos como Podemos".

Respecto a si el PSOE debería dar un "viraje al centro" en esta situación, ha señalado que ella no quiere que su partido dé "virajes", sino que tiene que tener claro que es el partido que vertebra España y el que ha dado estabilidad, derechos y libertades en este país durante muchos años de democracia. "Los virajes, para otros, no para nosotros", ha expresado Díaz, quien ha recalcado que no le preocupa que salgan fuerzas nuevas, porque ella, por ejemplo, tiene claro a dónde quiere que vaya Andalucía. "El PSOE no se puede acomplejar con nadie", según ha indicado la presidenta de la Junta, quien ha señalado que, no obstante, el auge de Podemos se lo toma como un "toque de atención" de esos ciudadanos que se encuentran en estos momentos desencantados y que no han encontrado una respuesta en los partidos tradicionales. "Lo tomo como eso, como un toque de atención, y es lógico que si están desencantados busquen ese tipo de alternativas", según ha expresado Susana Díaz.

En cuanto al programa económico de Podemos, ha señalado que le genera "mucha inseguridad" y ha advertido de que no hay nadie más "peligroso que quien está diciendo permanentemente lo que quiere escuchar la gente". Díaz ha asegurado que Podemos no le da ninguna seguridad podemos y que en este contexto, el PSOE tiene que defender lo que cree que es bueno para este país, al margen de lo que defiendan otros. Ha expresado que no le preocupa mucho lo que diga Podemos, pero, no obstante, se lo toma "con mucha seriedad", por respeto a los miles de ciudadanos que buscan ahí lo que otros no les estamos ofreciendo.

Sobre si contempla una gran coalición entre PSOE y PP, la presidenta ha indicado que su partido tiene que salir a ganar las elecciones y no estar pensando ahora en pactos de ninguna índole, al tiempo que ha recordado que el Partido Popular ha hecho "mucho daño" a este país. En su opinión, el PSOE tiene la responsabilidad histórica de salir de nuevo a lograr la confianza mayoritaria de la gente y ha señalado que ella no se ve pactando "ni con el uno ni con el otro", en referencia a PP y Podemos, esto es, ni con quien quiere desmantelar derechos y "echar gasolina al cabreo ciudadano" ni con quien quiere "poner en cuestión todo, hasta el 78". Ha reconocido que ninguno de los dos les da "seguridad", de manera que el PSOE tiene que salir a ganar las elecciones, porque es el único partido que está en condiciones de vertebrar este país.

Díaz ha indicado que aspira a gobernar en solitario en Andalucía tras las próximas elecciones autonómicas y ha descartado presentarse a las primarias del PSOE para elegir candidato a la Presidencia del Gobierno. Ha agregado que su voluntad es agotar la legislatura, porque se ayuda a la "estabilidad" en España. Ha indicado que si fuera el presidente del Gobierno, aprovecharía esa estabilidad que aportar Andalucía en un momento muy complicado. Susana Díaz ha reconocido que se siente feliz como presidenta de la Junta y que en "un futuro ya se verá", tras ser preguntada sobre si se ve como líder del PSOE.

Independentismo catalán

Para abordar el conflicto de Cataluña, la presidenta ha insistido en la vía del diálogo y en la necesidad de dar respuesta a la gran mayoría de la población catalana que quiere mejorar sus expectativas de futuro. Ha recalcado que hay que ofrecer un proyecto fuerte, ilusionante y bien orientado, algo en lo que, según ha lamentado, "no está" el presidente del Gobierno. La presidenta ha expresado que cree en Andalucía y en España y en su futuro y potencialidades, si bien es necesario construir un país atractivo, con derechos y libertades y del que nadie tenga que irse por falta de oportunidades. En su opinión, buena parte de lo que sucede en Cataluña tiene también que ver con esto. Ha advertido, en cualquier caso, de que una reforma de la Constitución no se puede orientar para "saciar lo que es insaciable", esto es, a los independentistas.

Modificación del artículo 135

Respecto al artículo 135 de la Constitución, cuya reforma fue pactada en su día por PSOE y PP, ha expresado que no le hubiera gustado verse "en el pellejo" de José Luis Rodríguez Zapatero en ese momento, con una presión internacional brutal y tener que tomar esa decisión, que fue, seguramente, uno de los motivos que permitió que no hubiera rescate de España. No obstante, ha insistido en que no le gustó ni el fondo ni la forma de la reforma de ese artículo, sobre todo, porque no se llevó a cabo sin dar voz a los ciudadanos. Se ha mostrado convencida de que el Gobierno del PP, con artículo 135 o sin él, hubiera hecho los mismos "recortes", porque lo lleva en su "ADN".

Ya sobre la reforma de la Constitución, ha considerado que el PSOE tendrá que presentar en un futuro un documento propio y decir cómo la quiere cambiar para que se garanticen los servicios públicos esenciales, como la educación, sanidad, pensiones y dependencia. Ha insistido en que su partido tendrá que presentar ese proyecto de reforma propio, con espacio de juego amplio para el diálogo.