La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha dicho que el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ve "adecuado, conveniente e idóneo" el pacto anticorrupción que le ha propuesto y ha afirmado que esa iniciativa no choca con la posición del líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha roto relaciones con el Ejecutivo. Rajoy y Díaz han mantenido en el Palacio de la Moncloa su primera reunión, durante una hora y media, que se ha desarrollado en un clima de normalidad, cordialidad y lealtad institucional, según han asegurado fuentes del Gobierno y ha constatado en rueda de prensa la presidenta andaluza.

La sucesora de José Antonio Griñán ha subrayado la necesidad de que Rajoy se ponga al frente de ese pacto anticorrupción "de máximos" y que éste se desarrolle "sin fisuras" y "afecte a quien afecte" con el fin de favorecer la transparencia total. Según ha explicado, esperará a ver "los hechos" tras esa petición, pero ha avanzado que Rajoy ha acogido su propuesta "de buen grado" y con un "buen tono", y ha compartido la reflexión de que hay que ser implacables contra esa lacra y hay que recuperar la confianza ciudadana.

Díaz, que ha considerado "injusto" e "ingrato" el descrédito de la política, ha rechazado que haya contradicción entre su iniciativa y la posición de Rubalcaba, contraria a llegar a acuerdos con el Gobierno debido a su actitud en el caso Bárcenas. Rubalcaba, según ha dicho, plantea en su ámbito de competencias la necesidad de una mayor transparencia por este asunto. Ella ha explicado que pide lo mismo en la esfera institucional, ya que la normativa estatal es insuficiente y limitará las aspiraciones de la futura ley autonómica. De hecho, ha insistido en que ambas posturas son "razonables y compatibles" y ha bromeado al señalar que no será ella quien le haga la sesión de control al Gobierno en el Congreso a Rubalcaba.

"Las discrepancias y contradicción que ustedes entienden yo no las veo", ha zanjado, para proclamar: "Yo he hecho bandera de lucha contra la corrupción y voy a combatirla con todas las herramientas que tengamos a nuestro alcance". Ha insistido en la importancia, por ejemplo, de prohibir las donaciones a los partidos, partiendo de la base de que "no hay que ser muy listos" para darse cuenta de que "quien da un euro a un partido espera, si no lo ha recibido ya, un beneficio a cambio". Lo que ha rechazado de forma tajante es que su propuesta sea "una componenda" para tapar la corrupción.

Respecto al caso de las facturas falsas de UGT, ha señalado que cuando finalice el proceso de revisión de todos y cada uno de los pagos -en los últimos días han sido reintegrados a la Junta 25.500 euros indebidamente cobrados-, los servicios jurídicos decidirán qué medidas adoptar para defender los intereses de Andalucía. Tanto en este caso como en el de los ERE fraudulentos ha mostrado su "respeto total" por la Justicia y ha confiado en que las averiguaciones sean rápidas, para que se depuren responsabilidades y se evite así que prescriban algunos delitos.

Preguntada por la propuesta de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, para que Cataluña tenga una financiación singular, ha reiterado que sus posturas son "antagónicas". "Yo tengo un límite, la igualdad de todos los ciudadanos vivan donde vivan", ha dicho, y ha aseverado que la petición de Sánchez-Camacho "quiebra esa igualdad".

Una parte de la cita, en la que Rajoy ha reiterado que el próximo año se abordará el nuevo sistema de financiación autonómica, ha estado centrada en cuestiones económicas. Según Díaz, Rajoy se ha comprometido a trasladar al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, las demandas de Andalucía para que se aborde cuanto antes la comisión bilateral que tiene que analizar los siete años de inversión por población en esa comunidad, en cumplimiento de su Estatuto. Del mismo modo, Díaz ha reclamado que los futuros fondos de liquidez autonómica de Andalucía tengan un trato equitativo como otras comunidades.

Ante la "insoportable" tasa de desempleo de su región, ha pedido a Rajoy la puesta en marcha de un plan extraordinario de lucha contra el paro, similar al que tienen otros territorios, y también que se realicen las obras necesarias del Corredor del Mediterráneo, como el tramo de ferrocarril Algeciras-Bobadilla. Díaz le ha reclamado a Rajoy reflexionar sobre la reforma local y un "diálogo sincero" para que la nueva ley de medidas para garantizar la función social de la vivienda no corra la misma suerte que el decreto-ley antidesahucios, que fue recurrido por el Gobierno. Díaz ha dejado claro que la lealtad institucional que ha ofrecido a Rajoy no será incompatible con la exigencia de que el Ejecutivo cumpla con Andalucía y ponga los intereses de los andaluces "en el sitio justo y que le corresponde".