La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de Andalucía, María José Sánchez Rubio, explicó ayer que el pasado 18 de diciembre la Junta de Andalucía presentó un recurso contencioso administrativo contra la aplicación del copago en las farmacias hospitalarias, una medida del Ministerio de Sanidad que, de momento, no se aplica en Andalucía. En declaraciones a los periodistas, la titular de Salud reiteró que el nuevo copago hospitalario impuesto por el Gobierno central "es una medida injusta que rompe con los principios de equidad del sistema sanitario", sobre todo, "para aquellas personas con enfermedades crónicas o muy graves", y que "supondría un menoscabo importante de su salud en el caso de que estas personas dejaran el tratamiento".

La consejera aseguró que "no es una medida que tenga que ver con un ahorro", porque el estudio previo hecho por una comisión de farmacia dentro del Consejo Interterritorial de Salud, "decía que el posible ahorro en mínimo, en torno a 1,7 millones en todo el país". Por tanto, Sánchez Rubio insistió en que "no están de acuerdo" con el copago farmacéutico hospitalario, que "se ha recurrido ante el contencioso administrativo", y el cual "no se va a aplicar, a no ser que nos veamos absolutamente obligados a hacerlo", concluyó.

El copago farmacéutico implantado hace poco más de un año por el Real Decreto 16/2012 ha triplicado el gasto en tratamientos oncológicos para las familias con rentas inferiores a 18.000 euros, según un estudio realizado por la Asociación Española Contra el Cáncer.

Según este informe, sólo con el copago farmacéutico, ante el caso de que en una familia se diagnostique un cáncer en alguno de sus miembros, la inversión mensual en salud pasaría de un 3% del presupuesto a un 18%. Con el nuevo copago hospitalario impuesto en septiembre a través del BOE agravará aún más esta situación de enfermos graves y sus familias. Asociaciones de enfermos y sindicatos ya han rechazado el nuevo gravamen.