Trabajadores de CajaGranada se han concentrado este viernes en la sede central de la entidad, aprovechando la entrega de banderas con motivo del Día de Andalucía en el edificio, para protestar por la propuesta que ha planteado a los sindicatos el grupo BMN (conformado, además de por la caja granadina, por Cajamurcia, Caixa Penedés y Sa Nostra) para la segunda reestructuración laboral necesaria para cumplir los requisitos apuntados por el Gobierno, que contempla la extinción de 530 contratos --que se sumarían a los 120 del ERE en vigor--, el cierre de 120 oficinas, y una reducción salarial del 5 por ciento durante dos años, entre otras medidas.

  El presidente del Comité de Empresa, Amador Torres, ha indicado a los periodistas que los sindicatos no van a "consentir" que se traspase la "línea roja" de los despidos, planteados, según ha dicho, "por los mismos gestores que nos han llevado a esta situación". Por ello, los trabajadores no descartan nuevas movilizaciones ni "ninguna acción en defensa" de sus puestos y "en contra de los que se han subido el sueldo y están jugando con el pan", señalan, de sus hijos. 

  "Haremos todo lo que esté a nuestro alcance", según ha apuntado Torres, para quien no se puede dar el mensaje al Banco de España de que "se está en condiciones de cubrir los requerimientos de capital", y, por otro lado, "decir a los trabajadores que la situación es tan mala que hay que prescindir de 650 personas, a las que hay que enviar al paro". "No pueden ser ciertas las dos cosas y no podemos consentir que las mismas personas que nos han traído a esta situación, los mismos gestores que no han sabido llevar la caja de ahorros y ahora no saben llevar un banco, quienes se arroguen una autoridad y representación que no es justa". 

  El presidente del comité ha recordado que las personas que ven ahora peligrar su puesto de trabajo, que, según sus cálculos, podrían ascender a 200 en Granada, "han dado su tiempo, esfuerzo y coraje por sacar adelante a la empresa". Por ello, ha criticado que los gestores del banco no estén teniendo en cuenta que las medidas que plantea podrían afectar a 200 familias en Granada y sí sigan las directrices de "personas que se basan en su interés propio para mantener sus privilegios". 

  Según la propuesta planteada por la dirección de BMN en la reunión mantenida con los sindicatos, este plan de reestructuración tiene por finalidad "adecuar el volumen de plantilla a las necesidades reales de BMN, adecuar los costes de personal a las posibilidades reales del banco, teniendo en cuenta la coyuntura económica en la que nos encontramos y armonizar las condiciones laborales, conforme a los compromisos adquiridos por ambas partes en el pacto laboral de 2010 y en el protocolo de intenciones de 2011".

  Fuentes de la entidad han dejado claro que la propuesta efectuada este jueves "es la inicial" formulada por la dirección, y ahora se ha abierto un periodo de negociación con los sindicatos que deberá estar cerrado hasta el 31 de marzo.