Andalucía

El propietario del asador de Marbella intenta recabar el apoyo de más insumisos

  • Califica de "barbaridad, dictadura y asalto" la ley antitabaco y recoge firmas en Madrid para impedir la clausura de su local

El despacho de abogados que asesora al dueño del Asador de Guadalmina, de Marbella, al que la Junta propone sancionar con 145.000 euros por permitir fumar en el local en contra de la ley antitabaco, considera "manifiestamente infundada en Derecho" la intención del Gobierno andaluz. Fuentes del bufete adelantaron ayer que tras la propuesta de sanción, reproducirán las alegaciones formuladas inicialmente ante la Junta y añadirán las que procedan en función de la notificación recibida en la actual fase administrativa.

Los letrados que defienden al dueño del establecimiento que se opone a cumplir la ley antitabaco señalaron que tras las alegaciones que presenten (para las que hay un plazo de 15 días desde el martes), se emitirá la resolución, que será revisable en la vía administrativa y en el tribunal de lo contencioso. El propietario del local, José Eugenio Arias, ya ha reiterado en varias ocasiones que no piensa pagar la sanción que la Administración autonómica ha propuesto imponerle por quebrantar la Ley General de Sanidad.

El empresario ha creado la asociación "Reforma (de la ley antitabaco) o Ruina (de la hostelería)", con la que recorre España y con la que estará hasta el próximo viernes en Madrid.

La Junta notificó el martes a Arias la propuesta de sanción por falta muy grave, al incumplir reiteradamente un requerimiento de la autoridad sanitaria, y la posibilidad de medidas cautelares como el cierre del local, ya que considera que "la actitud de este hostelero supone un quebranto de la Ley General de Sanidad".

El Ejecutivo autonómico requirió oficialmente al dueño del asador que depusiera su actitud, retirara los carteles incitadores al consumo de tabaco que colocó en el local y cumpliera la normativa en vigor.

Arias aseguró que no piensa pagar los 145.000 euros de sanción que la Junta propuso imponerle por quebrantar la Ley General de Sanidad. Arias avisó de que todavía está pendiente la resolución del recurso que interpuso y porque, a su juicio, "el expediente no está abierto", al tiempo que calificó de "barbaridad, dictadura y asalto" la medida de sanción hacia su local propuesta por la Administración autonómica. "Me da exactamente igual la sanción que me pongan porque no pienso pagar nada", enfatizó un seguro Arias. La delegación provincial de Salud de la Junta le notificó la propuesta de sanción por falta muy grave y la posibilidad de medidas cautelares como el cierre del establecimiento.

La Junta ha propuesto esa sanción al acusar al hostelero de incumplir reiteradamente un requerimiento de la autoridad sanitaria y considera su actitud "un quebranto de la Ley General de Sanidad". Por su parte, Arias se ve con fuerzas tras la batalla emprendida y aparentemente no valora deponer su actitud. "Me es imposible calcular las que llevamos, pero más de 100.000 ya sí", asegura.

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