Crítica 'Nacida para ganar'

El nuevo timo de la estampita

Nacida para ganar. Comedia, España, 2016, 93 min. Dirección y guión: Vicente Villanueva. Fotografía: Aitor Mantxola. Música: Antonio Escobar. Intérpretes: Alexandra Jiménez, Cristina Castaño, Victoria Abril, Trinidad Iglesias, Susi Bodega, Luisi Bodega, Vicky Bodega. 

Viendo esta segunda comedia de Vicente Villanueva uno se pregunta si en realidad no debería haber sido un drama con algún leve apunte cómico. Porque el asunto tiene poca gracia, a saber, la denuncia (aquí en clave satírica) de cómo una de esas empresas tapadera de productos de "autoayuda" se aprovecha de las gentes trabajadoras de barrio y de sus sueños de prosperidad a golpe de estafa.

La cosa es muy antigua, no por ello menos cierta, pero, claro, Villanueva se empeña en articular el mensaje en las claves de esa nueva comedia española de paso obligado por la nostalgia generacional (los 80 del sketch de la empanadilla de Martes y Trece, el regreso autoparódico de Victoria Abril) y cierta fórmula televisiva.

Y es una lástima, porque el asunto (las mil caras del neocapitalismo), el ambiente (Móstoles como universo autorreferencial), los tipos (la dependienta de la tienda de colchones, su compañera de trabajo enana, la amiga del insti convertida en vendedora de humo, el viejo profesor de Historia, la madre y las tías supremas…) y sus respectivos intérpretes (Jiménez está muy bien, pero mejor está Cristina Castaño) daban juego para mucho más.

El problema se agudiza cuando ya no se puede aguantar más el tono y la ingenuidad de farsa y la película opta por descalabrarse ella solita hacia el esperpento involuntario en su desenlace de acción. Un tercio final en clave de venganza justo-poética pone sobre la mesa que, en efecto, ésta siempre quiso ser en realidad una comedia convencional.

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