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Los más listos de la clase

  • La obra, precuela de la publicada en 2013 por Gaiman, retrocede hasta 1915 y narra los sucesos anteriores a la caída al mundo del Señor de los Sueños

Una imagen de 'Sandman: Obertura'.

Una imagen de 'Sandman: Obertura'.

Neil Gaiman, Alan Moore y Grant Morrison figuran con méritos sobrados en el listado de los mejores guionistas de la historia del cómic. Los tres británicos se granjearon una fama internacional cuando fueron contratados por DC en la década de 1980, y no han dejado de producir grandes obras desde entonces. Todos han trabajado en las mejores editoriales estadounidenses, aunque buena parte de sus obras pertenecen al catálogo de DC (en sus distintos sellos y filiales) y han sido, o están siendo, reeditados por ECC en nuestro idioma. Este mes, sin ir más lejos, han visto la luz los tres suntuosos volúmenes que paso a recomendarles.

Sandman: Obertura es la maravillosa precuela de la magnum opus de Gaiman, publicada en 2013, casi dos décadas después del final de la serie del sello Vertigo. Con impactantes dibujos de J. H. Williams III y colores de Dave Stewart, la historia retrocede hasta el año 1915 y narra los sucesos anteriores a la caída al mundo del Señor de los Sueños. El talento de Williams III es algo fuera de lo común, y todos y cada uno de sus trabajos son delirios visuales, repletos de sofisticadas composiciones de página (el presente tomo contiene incluso varios desplegables) que realzan la rara belleza de su línea. ECC ya publicó Obertura en cuadernillos, y recopila ahora el conjunto con un montón de material añadido que incluye las portadas alternativas, bocetos, explicaciones del proceso de trabajo, entrevistas y otros textos.

El Asco (2002-03), por su parte, recupera uno de los títulos más inclasificables y personales del ya de por sí inclasificable y personal Grant Morrison. En la onda de Los Invisibles o Flex Mentallo, esta miniserie de trece números, también publicada originalmente por Vertigo, combina ciencia ficción y recursos metaliterarios para cuestionar la realidad y nuestra supuesta libertad. A diferencia de Los Invisibles, en la que el baile de artistas acaba restando potencia a la totalidad, El Asco fue dibujado de principio a fin por Chris Weston y Gary Erskine, de modo que posee una mayor coherencia visual. Morrison llegó a declarar que esta es su obra favorita, y ya es raro que la reseña de The Comics Journal, una revista habitualmente crítica con el escocés, afirmase: "El Asco es lo mejor que ha escrito jamás Morrison". El apartado de extras contiene bocetos y el guion completo del número 5, entre otras cosas.

Tras haber dinamitado el género de superhéroes con La Cosa del Pantano, Watchmen, Miracleman y demás, Alan Moore sorprendió a los lectores a mediados de la década de 1990 con una serie de colaboraciones desenfadadas para la naciente editorial Image. Así, en 1995, se hizo cargo de los WildC.A.T.s, título estrella del estudio WildStorm, a los que puso patas arriba con el fin de la guerra entre demonitas y querubines y la creación del enigmático Tao, un personaje que acabaría dando mucho juego. Son tebeos divertidos, trepidantes, que alcanzan su mayor nivel en las páginas dibujadas por Travis Charest y que ECC vuelve a ofrecer ahora en un solo tomo.

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