Icarus Dúo | Crítica

Aforismos y columnas de aire

Alberto Plaza y Alfonso Padilla (Icarus Dúo) en el Espacio Turina

Alberto Plaza y Alfonso Padilla (Icarus Dúo) en el Espacio Turina / D. S.

Infrecuente la formación que en Encuentros Sonoros presentaron Alfonso Padilla y Alberto Plaza, dúo estable desde hace diez años. Pero el repertorio para saxo y guitarra se va haciendo, y en él se van viendo reflejadas muchas tendencias de la música contemporánea.

Más allá de la variedad estilística, la tendencia al aforismo, la inspiración en textos poéticos o, ya metidos en la propia materia sonora, el uso de aire en los instrumentos de viento como recurso sonoro son habituales desde hace más de medio siglo, y ahí siguen, siendo usadas de manera corriente.

Los haikus empleados por Santiago Báez o Sánchez Verdú o los poemas de Humet como punto de partida, las piezas breves de Wanamaker o las brevísimas miniaturas de Báez se mueven por ahí. Y aire, columnas de aire por doquier.

Icarus presentaba además un estreno del canadiense Robert Lemay, una pieza también muy breve, de ascética crudeza, y el experimento del onubense Martín Quintero con los ritmos de algunos palos flamencos.

Entre todo lo escuchado, destacó muy especialmente la poética de Sánchez Verdú, que en Mizu no oto trata de sugerir un ambiente japonés, y aunque recrea también sonoridades orientales (la guitarra en scordatura suena a koto, el saxo a shakuhachi), lo logra realmente con el sentido profundo de su escritura musical, con la levedad del sonido y el refinamiento exquisito de unas texturas que parecieran querer presentarnos un dibujo hecho a plumilla.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios