Desde mi córner
  • Con el Barça cantando un anticipado alirón, el resto de LaLiga es un muy poblado avispero

Sólo se aclaró el título de Liga

ESCLARECEDORA jornada esta vigésima sexta, pero sólo en las alturas, ya que del ecuador abajo se trata de un avispero del que todos quieren huir, pero que está resultando ciertamente complicado, con muchos haciendo la goma en un bucle interminable. Ahora bien, el asunto principal queda muy aclarado tras el triunfo del Barça mediante un derroche de fútbol ante un Real Madrid que acudió a la cita sin demasiada convicción.

Doce puntos de distancia cuando sólo son treintaiséis los que permanecen sin dueño dan pie para ver en el Barça al próximo campeón liguero. Y en lo que respecta al fútbol según Sevilla, nuevamente la cara vistió de verdiblanco y la cruz volvió a cargar los hombros de un Sevilla enloquecido. El Betis anda en una dinámica positiva por la que un partido que no debe pasar del empate se convierte en un triunfo más, señal inequívoca de que este Betis funciona.

Funciona en todos sus estamentos, de ahí que cada cita en Heliópolis sea sinónimo de una fiesta similar a las de los tiempos aquellos en los que el manque pierda no admitía discusión. Ante el ordenadoMallorca de Aguirre, en tarde para el sesteo de los porteros, el equipo se enfundó en pana para resolver mediante un afortunado lance de Borja Iglesias. Al poco, la fantasmal aparición del Sevilla junto al Cerro de los Ángeles para reactivar todas las alarmas.

Un Sevilla desquiciado y que para luego es tarde lo de poner pies en pared. Aunque son muchos los que peligran, el tiempo no puede transcurrir sin que se tomen medidas encaminadas a corregir el camino. Entre otras cosas porque es, con el Valencia, el que está menos acostumbrado a navegar por esas aguas tan turbulentas y pasa a veces que cuando reaccionas ya no estás a tiempo. Jornada esclarecedora pero sólo para el premio gordo; lo demás está muy repartido.

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