Alemania anestesió a Francia después de adelantarse muy pronto a balón parado y se convirtió en la primera semifinalista del Mundial. Muy solvente atrás, los germanos lograron frenar los mejores minutos del rival pero dejando abierto el marcador, a pesar de haber tenido en la recta final opciones suficientes para sentenciar. Por tercera vez en tres décadas, tras las semifinales de España 82 y México 86, la Mannschaft frustra una notable generación gala, la base del equipo anfitrión en la Eurocopa de 2016. 

Gran expectación por el partido que abría los cuartos de final, el único que enfrentaba a dos potencias de las consideradas tradicionales y el único además con dos campeones del mundo en acción. Sin llegar a ser de lo mejor del campeonato, imposible levantar los ojos del césped. En semifinales tendrá enfrente a Brasil, la anfitriona, que eliminó 2-1 a Colombia.

Para meterse en semifinales, Alemania tiró de fiabilidad. Para ello, Löw hizo varios cambios, devolviendo a Lahm al lateral, moviendo a Boateng al centro de la defensa junto al recuperado Hummels, volviendo a situar a Khedira en el centro, esta vez con Kroos y Schweinsteiger, y apostando por Klose para que Müller tuviera más libertad y la llegada de ambos pudiera competir con la fuerza mostrada por los defensas franceses, situación en la que Götze salía claramente perjudicado. Enfrente, Deschamps subrayó la defensa adelantada germana volviendo a poner a Griezmann como titular por la izquierda, de manera que el punta de la Real Sociedad y Valbuena pudieran abrir el campo y ganar la espalda del rival.

Ocurre que Alemania sale presionando muy arriba y a Francia le cuesta muchísimo salir, y que aunque las dos primeras ocasiones son galas (una buena ocasión de Benzema y un pase de la muerte de Grizmann tras ganar la espalda de Lahm que despeja la defensa) el tanto germano llega muy pronto y a balón parado. Una falta escorada y retirada la sirve perfecta Kroos y Hummels alecciona a Varane rematando perfecto adentro. Ni un cuarto de hora y a Francia se le desmorona el planteamiento.

Cierto que Alemania va a tener un serio problema para lanzar el contragolpe. Precisamente la apuesta por Klose y Müller hace recular a Özil y la salida alemana queda ralentizada. Benzema, con otro gran partido mostrando recursos para aburrir, no es suficiente porque las llegadas de Matuidi y Pogba son inexistentes en el primer acto.

Deschamps decide en la pausa subir el ritmo y la presión francesa se extiende por todo el campo, principalmente por la mitad alemana. Los germanos son incapaces de lanzar un contragolpe en condiciones y Francia va encerrando poco a poco a su rival, pero sin inquietar en serio a Neuer hasta una incorporación de Matuidi con un buen disparo que repele de puños el portero.

Por ahí, por donde Lahm, Francia tuvo la gran ocasión con el descuento cumplido, al romper en pared Benzema y tener tiempo para pensar y reventar la pelota arriba, pero Neuer la despejó a una mano con la tranquilidad de quien pide un taxi. Y todo porque Alemania, o quizás Schürrle, fue incapaz de sentenciar a Lloris a la contra, con un par de intervenciones en las que los galos debieron haber claudicado.

Después de las tremendas dudas ante Argelia, volvió la Alemania solvente, que adormeció el físico galo y aprovehó sus virtudes para erigirse en más candidata que nunca.

Francia 0: Lloris; Debuchy, Varane, Sakho (Koscielny, 71'), Evra; Cabaye (Remy, 73'), Pogba, Matuidi; Valbuena (Giroud, 85'), Benzema y Griezmann. 

Alemania 1: Neuer; Lahm, Boateng, Hummels, Höwedes; Khedira, Schweinsteiger; Müller, Kroos (Kramer, 92'), Özil (Götze, 83'); y Klose (Schürrle, 69'). 

Gol: 0-1 Hummels (13'). 

Árbitro: Néstor Pitana (Argentina). Amonestó a los alemanes Khedira y Schweinsteiger. 

Incidencias: Partido de los cuartos de final del Mundial de Brasil 2014 disputado en el estadio de Maracaná ante 74.240 espectadores. Veintiséis grados y 88 por ciento de humedad al comienzo del partido.

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