El club sigue enfrascado en días de intensas negociaciones de cara a satisfacer el deseo de Javi Gracia de contar con la mayoría del grupo en la pretemporada, al menos desde el viaje a Alemania la próxima semana. Y fruto de ellas en los días que vienen se esperan novedades. Ahora mismo, la posibilidad más cercana es la de Tighadouini, aunque desde el Málaga reconocen que cada día que pase sin que se concrete la operación podría complicar su incorporación. No es el único nombre sobre la mesa. Los nombres de Cop o Javi Guerra, entre otros, siguen estando ahí, si bien no se encuentran en un estado más favorable que el del extremo holandés del NAC Breda.

El Málaga y conjunto neerlandés siguen a vueltas para terminar de cerrar el montante de la operación y las garantías de pago que ofrecería el club de Martiricos para avalar los plazos, cuestión que fuentes del club creen que quedarían resueltas en las próximas horas si todo transcurre tal y como planean.

Mientras, no está tan claro quién será el otro elegido para acompañar a Charles en la pugna por el puesto de 9. Javi Guerra sigue siendo la opción más apetecible entre los directivos, pero las noticias que emanan de su entorno en los últimos días siguen siendo las mismas: el Cardiff no acelera en su caso ni da facilidades para su marcha. Para el Málaga, sería fundamental una pronta desvinculación, puesto que esperar todo el verano y arriesgarse a un "no" al final es un escenario que no se quiere manejar. A vueltas también de lo que pase con la cesión de Cop, todo puede pasar en los días venideros.

Otro de los que en el club consideran un fichaje para la campaña es Nordin Amrabat. Tanto es así, que en uno o dos días será presentado como nuevo jugador del Málaga, toda vez que es la primera vez que el club de Martiricos posee sus derechos federativos. Vuelve a existir entre los dirigentes la convicción de que está llamado a ser un futbolista diferencial en la plantilla, más ahora que tiene la certeza de que sus cinco sentidos han de estar en la camiseta blanquiazul. Ayer fue la primera vez que se ejercitó tras su incorporación tardía por la disputa de varios encuentros con la selección de Marruecos. Eso sí, el extremo irá muy poco a poco, puesto que se encuentra en plena ejecución del Ramadán y no está para mucha exigencia física, al menos si Javi Gracia no quiere incurrir en el riesgo de una lesión prematura. Poco a poco, irá aumentando la carga de trabajo para incorporarse al nivel de sus compañeros, que le llevan una semana de trabajo.