Tras realizar una concentración en Andorra de siete días, el E-gim Balonmano Antequera volvió ayer a su lugar habitual de entrenamiento, el pabellón Fernando Argüelles, con la vista puesta en su primer partido de pretemporada. El próximo sábado, a partir de las 19:30 en Arroyo de la Miel (Benalmádena), el conjunto entrenado por el malagueño Antonio Carlos Ortega tendrá su primera prueba de toque ante el Cuenca 2016, equipo que acabó la temporada pasada empatado a puntos con los antequeranos en la décima posición. La recaudación del encuentro se destinará a la asociación Cudeca, entidad dedicada a los cuidados paliativos de personas enfermas de cáncer. Las entradas ya están a la venta desde ayer lunes en la sede de la asociación benéfica, donde se podrán adquirir al precio de cinco euros. Asimismo, el Comité Provincial de árbitros, dependiente de la Delegación Malagueña de balonmano, donará los derechos arbitrales del partido que dirigirán los colegiados Muñoz Escobar y León Torrecilla. Con esta iniciativa, el objetivo no es otro que llenar las 650 localidades disponibles en el pabellón benalmadense.

Ya en Antequera, los pupilos de Ortega trabajarán en doble sesión durante toda la semana, excepto el miércoles, donde alternarán el trabajo en el gimnasio y en la pista por las mañanas, mientras que por las tardes se centrarán en las acciones técnico-tácticas. Las sesiones matutinas darán comienzo a las diez y las vespertinas a las seis. Para el miércoles tienen programada una única sesión de entrenamiento, por la mañana, en la que realizarán carrera continua y estiramientos. Y el viernes suprimirán el paso por el gimnasio para ampliar el trabajo en pista.

Por otro lado, el último fichaje del club de la ciudad de El Torcal, el pivote serbio Vuk Lazovic, pasó ayer el pertinente reconocimiento médico. El ex del Partizán de Belgrado es el quinto fichaje del Antequera y con su incorporación se cierra la plantilla para esta temporada. Mientras el serbio se sometía a las pruebas médicas, el resto de compañeros realizó el course navette, una prueba que mide la potencia aeróbica máxima de los jugadores.