Juan Ramón Muñiz anda pendiente de dos de sus piezas titulares, Antonio Hidalgo y Helder, para conocer si podrán ser de la partida ante el Granada 74 el próximo sábado. Las exploraciones hablan de mejoría en el caso de ambos, aunque aún no se pueda decir de manera tajante que estarán disponibles.

Ayer ambos se dedicaron a efectuar carrera continua. Se retiró antes el medio catalán, que arrastra una tendinitis en el ligamento rotuliano de su rodilla derecha, aunque él mismo casi dio por hecha su participación contra el conjunto de Antonio Tapia, a pesar de que precisó que esta dolencia le va a "dar la lata muchísimo" estas semanas.

Más reservado es el pronóstico del central portugués, quien, de manera fortuita, se produjo un esguince en el tobillo izquierdo durante la primera parte del partido contra el Cádiz. A pesar de que Silva estuvo a punto de entrar para sustituirle, finalmente pudo terminar el encuentro, aunque bastante dolorido y con la zona inflamada.

Habrá que esperar hasta el viernes para ver si está recuperado. En caso contrario, se planteará un gran dilema para Muñiz, ya que es seguro que Weligton no podrá actuar por acumulación de amonestaciones y tendría que recomponer su pareja de centrales habituales.

En el Granada 74 andan pendientes de Aranda y Saizar, ambos con molestias. El vasco sufre un esguince de grado 1, mientras el paleño se esfuerza por superar una sobrecarga muscular en su pierna derecha. Quien seguro no estará será el lateral Ruz, por acumulación de amonestaciones.