Sin tiempo para saborear las victorias. El BeSoccer CD UMA Antequera sacó su orgullo de pertenencia para dejar atrás una losa muy pesada, la de no haber ganado en la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Un éxito con fecha de caducidad. El alto ritmo competitivo, una vez pasado el fin de semana del partido, exige una preparación exhaustiva del siguiente reto a cumplir. El de la octava fecha del calendario liguero es de enjundia para la escuadra dirigida por Manuel Luiggi Carrasco “Moli”. El líder de la categoría de plata del fútbol sala nacional, Software DELSOL Mengíbar, se presenta este sábado 2 de noviembre (17:00 horas) en el Pabellón Fernando Argüelles con una ventaja de cuatro puntos. De ahí la importancia de sacar adelante este difícil derbi andaluz y evitar que se aleje en la clasificación un fuerte candidato al ascenso a la élite de la Liga Nacional de Fútbol Sala.

El Mengíbar viene demostrando su valía en las últimas campañas. En la última ya dio un serio golpe sobre la mesa al desplegar todo su potencial y alcanzar la final del play off de ascenso a Primera en la que cayó derrotado ante el Córdoba Patrimonio de la Humanidad. En este nuevo campeonato ha vuelto a confirmar su posición en la dura batalla por ocupar los primeros puestos de la tabla clasificatoria. Comparte con el cuadro antequerano la vitola de ser uno de los invictos de la competición con una racha de cinco triunfos y dos empates en un total de siete envites. En el último compromiso superó en tierras jiennenses al colista, Rivas Futsal, por un resultado de 4-2. Una escuadra caracterizada principalmente por su gran capacidad para competir en cualquier escenario con jugadores de mucha calidad y otros de mucho recorrido al máximo nivel como es el caso del veterano cierre José López.

Encarar un choque de alta dificultad como este duelo regional implica poner en la pista todos los sentidos y la calidad de cada uno de los miembros de la plantilla. Asimismo ayuda encontrarse en una dinámica positiva que refuerza el trabajo diario ante la fortaleza de un adversario sin haber perdido todavía. “Viene como líder y estamos a cuatro puntos. Sería importante no alejarnos mucho. Es un partido donde hay muchas caras conocidas y los detalles van a marcar la diferencia, porque los partidos están muy estudiados. Nos conoce muy bien y nosotros igual. Tenemos que estar muy atentos y concentrados, ya que trabaja muy bien la estrategia, la presión en primera línea y sale rápido a la contra. Cuenta este equipo con una gran variedad de sistemas con gente importante”, puntualiza Moli.

Los guerreros universitarios han estado trabajando sobre los antecedentes más recientes. Una victoria importante a domicilio debe ayudar a crecer sin caer en la relajación por hacer bien las cosas. Los puntos como local adquieren una relevancia mayor. “Hace dos semanas ganamos en Ceuta y en casa después empatamos. No nos podemos confiar. Un encuentro diferente en el que nuestro rival también viene con precaución, respeto y hay que tener cuidado. No podemos creernos que por ganar en Barcelona por primera vez, ya está esto ganado. Tenemos que intentar dejar los tres puntos en casa y, para ello, debemos contar con esos condimentos que hacen falta para competir un partido como este”, indica.

Moli ha trasmitido a sus pupilos que en casa deben dar otro paso adelante para reencontrarse con su mejor versión y devolverle la confianza a los aficionados con una mejor recompensa que los dos últimos empates. Enfrente hay un adversario complicado, lo que genera una motivación extra. “Mengíbar se quedó con la miel en los labios y atesora mucha experiencia en la categoría. La domina muy bien. Javi Garrido es un entrenador que conoce a la perfección la competición, a todos los jugadores y está haciendo un trabajo impecable. Este conjunto está llamado a meterse, como mínimo, en el play-off. Ahora se encuentra líder, cuatro puntos por delante nuestra y también dos por encima del Real Betis FS. Un firme candidato para pelear por el ascenso”.