El Marbella puede estar conforme con el resultado que se trae de Águilas. Y es que el equipo que dirige Oli fue capaz de aguantar la embestida del conjunto local gracias al orden y a la seriedad defensiva demostrada durante todo el partido. Por su parte, el Águilas continúa con su buena racha de resultados en esta segunda vuelta, y el empate le acerca todavía más al liderato tras el tropiezo del Écija ante el Ceuta.

El conjunto local dominó gran parte del encuentro, aunque fue el Marbella quien manejó los tiempos del mismo. El equipo que dirige Oli durmió el choque durante varias fases y se encerró en su campo en busca de un contragolpe que pudiese hacer daño a la zaga local. Así fue que la primera oportunidad del partido cayó para el lado visitante a través de un remate acrobático de Quini, al que respondió Iván Gómez con una gran parada.

La ocasión más clara para el Águilas la tuvo Navarro en el minuto 30, con una falta directa cuyo balón repelió el larguero. Los blanquiazules lo siguieron intentando y, aunque en la segunda mitad jugaron más y mejor, tuvieron menos llegadas a puerta. El Marbella parecía conformarse con el empate y, ante la imposibilidad de llegar con peligro, dio por bueno el empate y se dedicó a defender el resultado.

Con este marcador el Marbella se mantiene a un punto de salir de la zona de ascenso directo, y a cuatro de la salvación. La próxima jornada, los jugadores dirigidos por Oli reciben a un rival muy en forma, el Mérida, que ocupa la cuarta plaza de la clasificación y viene de golear al Mazarrón en su campo por 4-2.