Uno de los grandes objetivos trazados por el Málaga en las últimas temporadas era situar al Atlético Malagueño en la Segunda División B. El filial del cuadro blanquiazul ha estado peleando por conseguirlo los último años con nombres como los Samus (Castillejo y García), Juanpi, Fornals, Mula y un largo listado de nombres que acabaron haciéndose un hueco en el primer equipo, sin haber podido dejar al filial en la categoría de bronce.

El año pasado, el club pudo saborear las mieles del triunfo tras lograr el ascenso ante el Yeclano, en una eliminatoria que quedará en la memoria de los aficionados blanquiazules por un sensacional gol de rabona, anotado por Ignacio Abeledo. Logrado el ascenso, todo invitaba a pensar que el Malagueño; pese a ser un recién ascendido, podría desarrollar un buen papel en la categoría.

Sin embargo, el inicio de temporada de los de Dely Valdés dista mucho de ser el esperado. El filial blanquiazul suma siete derrotas, en los siete encuentros que se llevan disputados en el grupo IV de la Segunda División B. Una pregunta empieza a sondear al aficionado, cada vez más preocupado, ¿es este el peor Atlético Malagueño? El filial blanquiazul tan solo ha disputado tres temporada en 2ª B, siendo la primera de ellas en la que logró el histórico ascenso a la categoría de plata. En esa primera temporada, la 2002/03, el equipo estaba dirigido por Antonio Tapia desde el banquillo y en la que perdieron ocho partidos en toda la temporada, uno más de lo que llevan hasta la fecha los de Dely Valdés.

Su segunda andadura en la categoría se produjo tras el descenso desde Segunda División, en la que se mantuvo tres temporadas. En la temporada 2006/07, el filial cosecha sus peores rachas de derrotas, en una misma liga pierde nueve partidos consecutivos y posteriormente, diez encuentros. Una dinámica de la que el actual Atlético Malagueño se quiere alejar y que hace 11 años acabo cosechando el descenso a Tercera División.