Jornada sabatina aciaga para los golfistas malagueños en el Volvo Golf Champions de Sudáfrica. Miguel Ángel Jiménez y, sobre todo, Pablo Martín naufragaron en Links at Fancourt. Un día con condiciones duras en el que sólo 10 de los 35 participantes estuvieron por debajo del par y que dejó un reguero de tarjetas con abundancia de golpes.

En el lado positivo de la Armada española, José María Olazábal, que en dos semanas cumplirá 46 años, ha vuelto a la vida competitiva aunque casi ni recuerde la última vez que levantó un trofeo, allá por octubre de 2005 (Mallorca Classic), pues a falta de 18 hoyos ya es firme candidato al título. El belga Nicolas Colsaerts y el surafricano Branden Grace igualan en la cabeza del torneo, con un global de -10, pero el veterano Olazábal sigue asombrando a los decacampeones del Tour europeo y campeones de 2011 reunidos en el Links Fancourt de George. Olazábal es quinto, a dos golpes de los líderes y tras jugar por tercer día consecutivo bajo par (72 golpes), en un día difícil por el viento, las posiciones atrasadas de tees y banderas y por las ondulaciones propias del diseño de este campo.

Jiménez, que rondaba el Top 10, sufrió una primera vuelta dantesca. Doble bogey en el 1 y, desde ahí, bogeys en 3, 5, 6, 7 y 10. Un birdie en el 16 fue la única noticia positiva. De -3 acumulado pasó a +3 y marcha en el puesto 25, sin demasiadas perspectivas de ascender en la última jornada.

Más duro aún fue el campo con Pablo Martín, que entregó una tarjeta inusual de 90 golpes (+17). Tras un buen día al par el viernes, Martín hizo dos bogeys, cuatro dobles bogeys, un triple bogey y un cuádruple bogey. Es último en la clasificación, con un total de +20. El malagueño tuvo un día para olvidar.